Trabajar las sensaciones, el secreto de Gabriel Dávalos

12 de noviembre de 2014

|

Alejandro Rojas

|

Arte, Ballet, Fotografía, Gabriel Dávalos

La Habana es una ciudad que, a pesar de sus 495 años, luce todavía sensual. Al menos así la ve Gabriel Dávalos, quien ha usado al ballet como pretexto para mostrarnos lo delicado y hermoso de una urbe que no descansa.

La capital de todos los cubanos, la de los más de dos millones de personas, se nos presenta en Habana Sensual, más que como un lugar, como un alma vieja, lista para aceptar nuevos retos, para desnudarse ante un lente que la capta con maestría y mostrar todo lo que tiene.
Sobre estas experiencias y la génesis del proyecto conversó Gabriel Dávalos con Habana Radio.
Cómo llega a ti la idea de mezclar lo clásico y lo culto del ballet con lo popular de un barrio en La Habana.

 

Eso fue un proceso, una mezcla de tiempo y pensamiento.Había ido a conocer a Viengsay Valdés justo unos días después de su promocióne hicimos una bonita amistad, incluso compartimos un grupo de amigos donde había todo tipo de personas y salíamos mucho, íbamos al ballet, al teatro, a la playa y entonces, conocer a los bailarines con ese talento extraordinario, con ese don y verlos también en las mismas situaciones de nosotros: la guagua, la economía, los dolores, las relaciones amorosas; sentirlos parte de la vida que vivimos después de haberlos visto como mitos sobre el escenario,fue la primera razón, es decir, era como desmitificarlos.
Y la otra es que soy un “habanadicto” pero no porque digo que la amo, y que sea lo más grande, sino porqueLa Habana me choca y los habaneros también.Me resulta áspera, me duele lo que se vive día a día, pero atrás de eso tengo una sensación de amor, de pasión, y padecer la habana de pedacito a pedacito me lleva a resaltar lo bello que tiene.
También pudiéramos hablar de que a mí me parece que no hay mejor lenguaje para describir como son los cubanos y los habaneros que la danza, porque nosotros andamos con mucho movimiento, somos sensuales.

 

¿Cómo lograste hacer las primeras fotos?
Al principio no tenía cámara,pero conocí un tenor italiano que era discípulo de Pavarotti, y me dice que iba a presentarse en la ciudad y quería que yo le tirase las fotos. Yo le advertí que hasta ese entonces yo lo tenía solo estudios teóricos, pero él insistió ycometió el error de prestarme la cámara con un díay medio de antelación.
Al momento llamé a dos bailarinas que entonces estábamos comenzando una amistad, a Grettel Morejón y a Amaya Rodríguez.
El primer día me fui con Grettela una azotea del cerro, y allí le hice la primera foto. Le dije: “salta, salta un momentico para probar, a ver cómo se me da esto”…
Tiré la foto y está en el libro; de frente con las manos abiertas Grettel parece que está volando.Cuando vimos la imagen nos dimos cuenta de que por ahí andaba algo y ese día hicimos dos o tres más.
Ya al otro día llamamos a Amaya y nos fuimos al malecón.Esa es la foto que salen las dos saltando sobre el muro, o sea, esas fueron las imágenes dela primera y la segunda jornada de trabajo, me las llevé y las escondí en la computadora, no se las di ni a ellas.
Meses después decidí publicarlas en Facebook, eso marcó un antes y un después. Antes de la red social yo tenía unas fotos en una computadora y después la gente empezó a verlas, a darle alas, a ponerles lo suyo y fue que pasó todo lo demás.
Entonces Facebook es tu gran galería, tu gran plataforma…
Bueno ya te digo que había un antes y un después.Yo no entraba en las redes sociales, cuando aquello ya Facebook existía y no quería hacerme el perfil, me resistía, no me parecía interesante, perotenía unas fotos guardadas y me dije:“me voy a abrir una página”, y la abrí; pero no la trabajé, empecé a estudiar Facebook por mi cuenta, a ver cómo funcionaba.
Hasta que decidí ponerlas, desde el primer día había fotos que alcanzaban más de 10 mil likes.Eso significó las exposiciones que tengo, las invitaciones a programas, incluso, el libro Habana Sensual, yo no tengograndes canales de comunicación más allá de Facebook.

 

Hablamos mucho de Habana Sensual, pero no sabemos cómo surgió ese nombre…
Habana Sensual fue el primer nombre que le di al primer álbum que creé en Facebook. A partir de ahí empecé a publicar las fotos, o sea, eso viene desde el mismo origen…
Estamos hablando de un libro a bailarines, pero ¿ellos son tus protagonistas?
El bailarín, o la bailarina,son el pretexto y son los protagonistas de una historia dentro de todas las historias que hay en La Habana en este momento.Y eso es lo que intento contar, la historia de lo que somos, de lo que fuimos en una época determinada, y que cuando alguien vea las imágenes en una época posterior diga: “mira como lucía la ciudad, mira las historias que contaba”. Otros lenguajes pueden ser hirientes, desgarradores, pero la danza lo que hace es facilitar la comunicación entre el que mira y la urbe.

 

Gabriel algunas imágenes vienen acompañadas de textos que las complementan…
No te puedo decir que el texto venga inspirado por la imagen, ni al revés, generalmente yo trabajo la fotografía y voy haciendo las imágenes. Se me ocurren las representaciones, veo mucho ballet y de allí me nacen las ideas, miro mucho La Habana y de ahí me salen otras.
Los textos son de mis experiencias personales, de algunos viajes, de situaciones cotidianas y yo no sépor quédespués hay tanta relación entre los dos, cuando los uno parecen que fueron hechos para estar juntos, pero en su génesis, al principio de todo, no tienen el punto común de la creación.
Trabajas casi como tu estilo el blanco y negro, ¿qué te transmite una imagen a ti con esas tonalidades?
Te voy a decir la verdad, nunca la he dicho.
Yo tengo tres amigos que son hermanos del alma y uno de ellos varios días me pidió que usara el blanco y negro. Yo no quería, hasta que una vez me dijo:“por favor yo te pido que uses el blanco y negro”,  y esa para mí fue la razón principal.
De ahí en adelante te puedo decir todo lo que llevanesos colores conceptualmente, estéticamente.Toda la nostalgia, los matices de los grises que tienen que ver con la realidad cubana, con la situación de La Habana, con la tragedia familiar de las separaciones, con todo eso.
Pero la partida es por un amigo que desde la distancia necesitaba su blanco y negro y yo se lo quise regalar. A partir de ahí la fotografía comenzó a trabajarse sin muchos colores.

 

Imagino que lograr esas instantáneas no debe ser muy fácil… ¿cómo es el trabajo durante las sesiones?
Hacer una sesión de fotos es agotador, conmigo dura el día entero, hacemos centenares de imágenes.Hay fotos que se repiten hasta 70 y 80 veces, imagínate repetirun salto tanto.Los bailarines se agotan, se cansan, a veces hasta se lesionan y es casi como bailar un ballet.
De mi parte igual, cuando estoy haciendo fotos es un proceso de creación muy fuerte; el cerebro no para de funcionar, me agoto mucho, me estreso, me canso, es desde las 8:00 de la mañana y hasta las 8:00 de la noche, 12 horas sin comer, porque no me da hambre, y a los bailarines muchas veces tampoco.Entonces es muy difícil.
Yo digo que la fotografía de ballet no me va a gustar y a laspersonas no les van a impactar si mi posición como fotógrafo es cómoda, y la del bailarín o la bailarina también.Entonces empezamos por poses sencillas, pero al ratico estamos en posiciones incómodas o difíciles, que es lo que produce el impacto visual en la gente.Al público le parece una foto creativa cuando nota que hay algo raro en ella y eso está dado por lo difícil que fue tomarla o lo imposible.
Hay quienes me dicen que son montajes, y si piensan que mis fotos son montadas muchas gracias, logré que parecieran imposibles.
¿Cómo es el periodismo de Gabriel Dávalos?
Sin grandes pretensiones, mis fotografías y mis textos son mi manera de hacer periodismo. Yo trabajé varios años en el periódico Granmay fue cuando empecé a manejar este estilo elemental de ser breve y tratar de escribir con mis sensaciones.Tratar de escribir lo que yo siento y de la manera más sensorial posible, es decir, usando las palabras que creo exactas para describir una sensación.
A mí me gusta pensar todo tanto para el periodismo comopara la fotografía a través de lo sensorial. Hay muchísimas cosas para describir, desde la realidad, los hechos y hasta las ideas, pero yo prefiero representar las sensaciones, eso es lo que he intentado hacer siempre, porque escribo para todo el mundo y el lenguaje de las emociones está en cualquier grupo social.
¿Después de mostrarnos una Habana Sensual qué quieres fotografiar?
Después de la danza probablemente fotografíe la danza, y luego de la danza, por segunda ocasión,sería la danza otra vez.Después de eso, me gustaría hacer un poco de fotografías documental y social, no las mismas, algunas que tengo que encontrar.
Yo dije una vez que lograr una imagen era un acto intelectual, de pensamiento, hay gente que no sabe lo que busca y por eso no encuentra nada; yo para hacer otra fotografía tendría que pensar en lo que quiero para salir a buscarlo y eso es lo que haré, llegado el momento si me decido voy a pensar mucho lo que quiero lograr para ver si lo encuentro.