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Efemérides

Historia

Tiene lugar, en el Stadium de la Universidad de La Habana, el histórico Homenaje Nacional de Desagravio a Alicia Alonso

15 de septiembre de 1956

Tiene lugar, en el Stadium de la Universidad de La Habana, el histórico Homenaje Nacional de Desagravio a Alicia Alonso, víctima de incomprensiones, maltratos y agresiones de instituciones vinculadas a la dictadura batistiana.

En la noche del sábado 15 de septiembre, el estudiantado universitario, la intelectualidad patriótica y los sectores más progresistas de la nación, expresaban su reconocimiento a Alicia, Fernando Alonso y sus colaboradores, por el extraordinario mérito de haber creado un movimiento profesional de ballet digno de las mejores tradiciones culturales de Cuba.
El acto de desagravio fue organizado por la Dirección de Cultura de la Federación Estudiantil Universitaria y el Comité de Defensa del Ballet, y contó con el apoyo solidario de las más prestigiosas instituciones cívicas, culturales y artísticas del país.

En aquel acto, el líder revolucionario Fructuoso Rodríguez emergió de la clandestinidad, pocos meses antes de caer asesinado por los esbirros de la dictadura en Humboldt 7, para patentizar el respaldo estudiantil a Alicia y al Ballet de Cuba y exhortar al pueblo a combatir los desmanes del régimen.

Después, los millares de espectadores allí reunidos corrieron hacia el improvisado escenario donde la bailarina acababa de interpretar La muerte del Cisne y, entre lágrimas y aplausos, le ratificaron su profunda admiración por la obra realizada en pro de un ballet cubano.

Tras efectuar una gira de protesta por todo el territorio nacional, Alicia Alonso radicalizó aún más su posición frente al régimen, al negarse a continuar actuando en Cuba mientras se siguiera derramando la sangre de sus mejores hijos.

Años después, exactamente el 3 de febrero de 1959, en el habanero Teatro Blanquita – hoy Karl Marx – una función especial para el Ejército Rebelde y el Gobierno Revolucionario, ponía fin a tan digna postura y ofrecía una sublime evidencia de los nuevos tiempos que nacían para el ballet y la cultura nacional.

Literatura

Los criollos de La Habana hacen petición a los Reyes de España para fundar la Universidad

15 de septiembre de 2009

En esta fecha se realiza una petición de los más acaudalados de La Habana a los Reyes españoles para fundar la Universidad de La Habana.
Aunque no puede afirmarse que la enseñanza durante el siglo XVIII alcanzara un gran desarrollo como en los siglos venideros, debe destacarse su asentamiento definitorio y estable en la rama de los estudios superiores desde la mitad del siglo.
En 1722 se funda en Santiago de Cuba el Seminario Conciliar de San Basilio Magno y en esa misma década se crean el Colegio de San Carlos, que se fundiría con San Ambrosio en 1773.
En 1728 se funda la Universidad de La Habana, basada en los preceptos de la escolástica, de acuerdo con los reglamentos de la Universidad de Santo Domingo que los había puesto en funciones desde el año de su fundación en 1538.
Fundada por los frailes dominicos de la Orden de los Predicadores, bajo el nombre de Real y Pontificia Universidad de San Jerónimo de La Habana, funcionó en un primer momento en el convento de San Juan de Letrán, situado en el área que hoy delimitan las calles O Reilly, Obispo, Mercaderes, y San Ignacio.
Una vez establecida, el rey de España Felipe V de Borbón, la aprobó y confirmó por Real Cédula en septiembre del propio 1728.
Años más tarde, en julio de 1734 sancionó sus Constituciones y Estatutos.
Fue su primer rector Fray Tomas Linares, nombrado por el rey en 1738.
La importancia de esta nueva casa de estudios estribaba precisamente en su nombre, puesto que se oficializaba una escuela de altos estudios en Cuba donde ya existían importantes centros de enseñanza.
(1721)

Música

Primera audición en Cuba del Concierto No. 22, para piano y orquesta, de Mozart

15 de septiembre de 1935

Los Conciertos para piano y orquesta escritos por Mozart a partir de 1785, y que abarcan los números del 20 al 27, constituyen un magnífico ejemplo de la capacidad de ese compositor para la expresión romántico y sentimental.
Mozart se aleja en ellos del espíritu cortesano y ligero de sus serenatas y divertimentos, para introducirse en una atmósfera más profunda y subjetiva. Y ese énfasis emotivo se hace más evidente en los movimientos centrales, cuyo aire lento permite una mayor libertad en la expresión del discurso melódico.
Y a esa serie de ocho Conciertos pertenece, por supuesto, el número 22 en Mi bemol Mayor, escrito en diciembre de 1785.
Resulta interesante destacar que en este Concierto, al igual que en el número 23 y en la Sinfonía en Mi bemol Mayor, Mozart sustituye los oboes por dos clarinetes, lo cual establecía, en su tiempo, una sonoridad orquestal más dulce y moderna.
El primer movimiento de la obra no se aparta del carácter general de los Allegros mozartianos. En cambio, el segundo movimiento, marcado como Andante, presenta un tema con variaciones, forma poco habitual en los Conciertos para solista en esa época. El Allegro final, por su parte, posee el sentido rítmico y la jovial expresión de una danza popular.
Y la primera interpretación en nuestro país de este Concierto No.22, en Mi bemol Mayor, para piano y orquesta, de Mozart, estuvo a cargo de la Orquesta Sinfónica de La Habana, dirigida por Gonzalo Roig, y la pianista Margot Ross. Eso ocurrió en el Teatro Martí, hace 72 años, UN DIA COMO HOY.

Primer concierto de la Orquesta Filarmónica Real, de Londres

15 de septiembre de 1946

El 15 de septiembre, el de 1946, la Orquesta Filarmónica Real, de Londres, ofreció su primer concierto.
Fundada por Sir Thomas Beecham con la participación de algunos de los mejores músicos ingleses, la Filarmónica Real tuvo un éxito inmediato, y durante los primeros quince meses de existencia había realizado más de cien grabaciones discográficas.
En 1948, o sea, a sólo dos años de su fundación, la Filarmónica Real actuó en el Festival de Edimburgo y comenzó también una colaboración muy estrecha con la Opera de Glyndebourne, la cual se mantuvo durante quince años. En 1952, la prestigiosa orquesta londinense hizo su debut en los famosos conciertos “Promenade”, que dirigiera Sir Henry Wood.
Después de la muerte de Beecham, en el 61, la dirección titular de la Orquesta pasó a manos del alemán Rudolf Kempe, quien desempeñó esa importante posición artística hasta poco antes de su fallecimiento, ocurrido en 1975. A la muerte de Kempe, fue llamado a la máxima jefatura de la Filarmónica Real el húngaro Antal Dorati, quien tuvo a su lado, en calidad de director asociado, al ruso Yuri Temirkanov.
A Dorati le sucedió en el cargo el famoso pianista y director Vladímir Ashkenazy, quien convirtió a la Filarmónica Real en el organismo de su tipo en toda Inglaterra que más giras nacionales y más actuaciones en programas televisivos realiza al año.
También se hicieron frecuentes las giras internacionales y la grabación de discos y música para películas.
La Orquesta Filarmónica Real de Londres ofreció su primer concierto bajo la batuta de Sir Thomas Beecham, hace 61 años, UN DIA COMO HOY.