El bloqueo de Estados Unidos contra Cuba es una política absurda, ilegal y moralmente insostenible

16 de septiembre de 2015

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Nadia Herrada Hidalgo

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Bloqueo, Cuba, Política

 Fotos tomadas de Cubadebate

 

 

El Ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez Parrilla, presentó en conferencia de prensa esta mañana en la sede de la Cancillería, el nuevo informe de Cuba sobre la resolución 69/5 de la Asamblea General de las Naciones Unidas titulada “Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba”
El Canciller declaró que este informe se origina de una renovación a la resolución presentada usualmente, y tiene un enfoque de derecho internacional, basado en la igualdad soberana de los estados y la libertad de comercio y navegación internacionales.
Bruno Rodríguez Parrilla informó que a pesar del nuevo contexto de las relaciones diplomáticas restablecidas recientemente entre Estados Unidos y Cuba, continúa vigente el bloqueo con numerosos efectos negativos sobre la población cubana, de la cual el 77 % ha vivido bajo su efectos.
En ese sentido, ilustró con cifras y ejemplos la situación actual, y explicó que permanecen las mismas medidas recriminatorias hacia nuestro país: imposibilidad de importar o exportar bienes y servicios directamente entre ambos países; prohibición de utilizar el dólar para transacciones financieras internacionales y negación de atracar en puertos norteamericanos en caso de que el barco haya visitado Cuba en un periodo menor de 180 días.
Asimismo, Rodríguez se refirió al alto costo humanitario que ocasiona el bloqueo a pacientes oncológicos cubanos y aludió a las exorbitantes multas aplicadas a bancos y empresas extranjeras que han tenido relaciones con nuestro país.

El Ministro de Relaciones Exteriores aseguró que el informe está centrado en el presente, no en el pasado y que en él se manifiestan situaciones vividas en los últimos meses.
De la misma forma, expresó que Cuba celebra el proceso de diálogo con Estados Unidos el cual demostró que el respeto mutuo es el único camino. Sin embargo, alertó que el proceso de normalización de relaciones bilaterales no es posible mientras exista el bloqueo. Lo que determinará el ritmo del proceso de normalización será el estado del levantamiento y las decisiones que tome el Congreso en ese sentido.
El Canciller explicó que el único gesto que diría si el acercamiento entre ambos gobiernos ha tenido sentido es el levantamiento completo e incondicional del bloqueo. Según sus palabras, es conveniente para Cuba, pero también para el pueblo de Estados Unidos cuyos ciudadanos, mayoritariamente, apoyan la decisión y quieren por ejemplo, ejercer libremente derechos como el de viajar a la Isla.
En otro momento de su intervención, Bruno Rodríguez Parrilla anunció que el presidente cubano, Raúl Castro, pronunciará un discurso ante la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU) en la tarde del lunes 28 de septiembre, y sostendrá encuentros bilaterales con autoridades de diferentes países, reuniones con personalidades estadounidenses y con miembros de la emigración cubana.
En el seno de la Asamblea General de las Naciones Unidas, durante 23 oportunidades consecutivas, una abrumadora mayoría ha reconocido al bloqueo de Estados Unidos contra Cuba como una política absurda, ilegal y moralmente insostenible.
Expresó que la ONU está urgida de una profunda reforma para democratizarla y enunció sus preocupaciones al respecto. Por otra parte, afirmó que el cumplimiento de los objetivos de la Agenda de Desarrollo Post 2015 –que debe ser aprobada próximamente– depende de cómo se implementará.
Aludió además, a la terrible situación que viven los inmigrantes en la Unión Europa, a lo poco que se ha hecho para materializar el desarme nuclear y a la compleja realidad que vive hoy el pueblo venezolano.
En la conferencia –transmitida por la Radio y la Televisión Cubanas– el Canciller abordó temas de interés nacional e internacional. Se refirió a la próxima visita del Papa Francisco a Cuba y la calificó como un acontecimiento extraordinario en el que participarán masivamente creyentes y no creyentes. También enfatizó en que nuestro pueblo acogerá al Santo Padre con aprecio y hospitalidad.