Secreciones Vaginales

19 de junio de 2021

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Cecilia Garcia

 

 

Las secreciones vaginales pueden tener diferentes causas, en algunos casos son normales pero siempre es el especialista quien debe dar un diagnóstico. Pueden presentarse cuando se elevan los niveles de estrógenos, por ejemplo días antes de la menstruación o meses antes de la primera en el caso de las adolescentes. Es posible que aumenten también durante el embarazo, cuando se está bajo tratamientos de fertilidad o se utilizan píldoras anticonceptivas (anticonceptivos orales).

Pero las secreciones vaginales no siempre son normales y una señal de que algo está pasando puede ser el color, densidad u olor de la misma. Cuando es más densa o espesa de lo habitual, tiene aspecto purulento o blanco lechoso, huele mal o a pescado, es un signo de que ha dejado de ser normal y sin demora debemos acudir al especialista.

Las causas más frecuentes de una secreción anómala pueden ser:

Hongos en el caso de la monilia que hace que se torne de aspecto grumoso y blanquecino.

Bacterias que producen un flujo amarillo verdoso (en el caso de la gonorrea) o cambie  su olor por de pescado en mal estado cuando se padece una Vaginosis Bacteriana.

La Clamidia y la Trichomona pueden también cambiar el aspecto de los fluidos vaginales

Otra causa podrían ser los tratamientos con antibióticos, el uso de gel de baño o algún bactericida vaginal.

En ocasiones estas secreciones vienen acompañadas de ardor al orinar, picazón,  enrojecimiento de los genitales, sangrado o dolor durante las relaciones sexuales. Cuando se tiene algunos de los síntomas antes mencionados debemos acudir sin demora al médico.

Muchas veces las personas tienden a utilizar óvulos vaginales por su cuenta o por recomendación de una amiga o familiar que ha pasado por una situación aparentemente similar, no debemos olvidar que en el caso de las ITS algunas de ellas tienen síntomas parecidos, pero las causas son diferentes, por lo que los tratamientos tampoco son los mismos.

Acudir al médico de inmediato es la mejor opción, recordemos que en ocasiones estas infecciones llegan a causar infertilidad en la mujer, lo que evitaríamos con el diagnóstico y la atención temprana. Es oportuno recordar también que el tratamiento, cuando la causa es una ITS debe ser realizado también por la pareja sexual.

Ante cualquier secreción vaginal, lo mejor es acudir tempranamente al especialista.