CAMAGÜEY. — Como reconocimiento a la labor de rescate, restauración y protección del patrimonio histórico, cultural y arquitectónico de esta ciudad, ya próxima a cumplir 503 años de fundada, la Comisión Nacional de Monumentos decidió trasladar hacia estos predios su primera sesión de trabajo del año.
Gladys Collazo Usallán, presidenta del órgano adscrito al Consejo Nacional de Patrimonio Cultural, ponderó el grado de concertación logrado en el territorio para enfrentar una obra de tal magnitud, tarea imposible de ser asumida solo por los especialistas de la Oficina del Historiador de la Ciudad de Camagüey.
En ello fue enfático José Rodríguez Barreras, su director, quien al referirse a los veinte años de la institución (24 de febrero de 1997) mencionó, entre los principios invariables de actuación, el estricto apego al plan parcial y de manejo de la zona patrimonial y la consulta permanente con la comunidad.
En recorrido por la otrora villa principeña, los integrantes de la Comisión Nacional de Monumentos conocieron de primera mano la marcha de los principales proyectos en ejecución, como el Parque Temático del Ferrocarril, en torno a la vieja terminal de trenes, y el Recinto Ferial, en áreas de la antigua planta eléctrica.
Reunidos en el Centro de Convenciones Santa Cecilia, los expertos pasaron revista a su gestión durante el 2016, dirigida a la implementación de las acciones de protección del patrimonio cultural y material del país, específicamente de los sitios declarados monumentos nacionales, locales o zonas de protección.
Especial preocupación mostraron los especialistas por el crecimiento que ya se aprecia en la actividad turística en las ciudades patrimoniales y la necesidad de establecer nuevas dinámicas de relación, para lograr un correcto manejo y evitar sobrecargas que puedan afectar la vida de sus pobladores.
Gladys Collazo Usallán mencionó a Remedios como ejemplo de cómo patrimonio, cultura y turismo se unen para el bien común, al restaurarse inmuebles que estaban casi para demoler, a los cuales se les preservaron sus valores arquitectónicos y se reanimó la ciudad de una manera inteligente.
Se debe trabajar, explicó, para fortalecer la identidad de cada lugar, no solo desde el punto de vista arquitectónico sino también en relación con el acervo inmaterial, pues ninguno de los cuatro centros históricos inscriptos hoy en el Patrimonio Mundial (La Habana, Cienfuegos, Trinidad y Camagüey) se parecen entre sí.
La Comisión Nacional de Monumentos decidió proponer, para la aprobación definitiva por el Consejo de Ministros, la declaración como Monumento Nacional del Paisaje Cultural de Las Terrazas, en la provincia de Artemisa, por sus auténticos valores naturales, ambientales, históricos y culturales.