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¿Y es que hay dudas todavía?

1 de abril de 2024

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«Nada nos detendrá, ni siquiera Estados Unidos» ha dicho el Führer israelí, Benjamín Netanyahu, luego de informar que sus tropas están listas para bombardear y barrer a Rafah, la tierra que, dentro de la Franja de Gaza, ha servido para que algo más de un millón y medio de palestinos se protejan.

Veinticuatro horas antes, lo que se supone sea el organismo más importante y respetado del mundo —el Consejo de Seguridad de la ONU— había aprobado, con la abstención de Estados Unidos, una Resolución para un cese al fuego inmediato en Gaza.

Netanyahu dijo haber trasladado al presidente estadounidense, Joe Biden, su agradecimiento por el apoyo, así como su malestar por la reciente abstención de Washington en la resolución sobre un alto el fuego en Gaza en el Consejo de Seguridad de la ONU, una decisión que calificó de «deplorable», según reportes de Sputnik.

«Hemos aprobado los planes operativos para una gran operación por tierra en Rafah», aseguró el premier sionista, en desafío absoluto a la comunidad internacional representada por la ONU.

Pero no solo esa bofetada ha recibido la comunidad internacional, por cuanto, desde Estados Unidos, un reporte de prensa llegó con la noticia de que el congresista republicano por el estado de Michigan, Tim Walberg sugirió que su país debe «lanzar una bomba atómica en Gaza, tal y como lo hizo en las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki», para, según él, «acabar con la guerra».

En tal sentido, agregó, «no debemos gastar un centavo en concepto de ayuda humanitaria (…) Debe ser como Nagasaki e Hiroshima. Es rápido».

Vale recordar que, en noviembre pasado, el ministro de patrimonio de Israel, el ultraderechista Amichai Eliyahu, dijo que una de las opciones en la guerra contra los palestinos en la Franja de Gaza es «usar la bomba nuclear».

Pareciera tratarse de una competencia entre los carniceros nazis que acabaron con la vida de millones de seres humanos en los campos de concentración, durante la Segunda Guerra Mundial.

Mientras, la sumatoria del horror, refleja este lunes que más de 32 782 palestinos han muerto y 75 298 han resultado heridos en los casi seis meses que lleva la arremetida militar israelí contra Gaza.

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