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Una apuesta fallida de Trump

7 de enero de 2019

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El año que ya transcurre en su primera decena de enero, ha comenzado a sumar pesares sobre el presidente estadounidense, Donald Trump, quien no ha sabido dar una respuesta coherente y razonada al tema fronterizo y de los miles de inmigrantes centroamericanos que se agolpan en uno u otro lado de la cerca que separa a México y Estados Unidos.

El diario The New York Times ha publicado que “según muchas de las personas que trabajan a lo largo de la frontera y en algunas de las agencias de seguridad del gobierno, el caos creciente es, en buena medida, resultado de una apuesta fallida del gobierno de Trump: políticas fronterizas cada vez más severas para disuadir la llegada de migrantes procedentes de Centroamérica”.

Refiere la publicación norteamericana que aunque “Donald Trump afirma que sus medidas migratorias atienden una crisis en la frontera, todo indica que sus decisiones no han hecho más que empeorarla; cada vez hay más migrantes detenidos por más tiempo en centros que no están pensados para las mujeres y niños que los atestan”.

Relata el diario que la red de albergues de El Paso que dirige la organización sin fines de lucro Annunciation House recibe ahora a unos doscientos migrantes nuevos cada día; hace un año acogía a esa misma cantidad a lo largo de una semana completa.

En noviembre de 2018, la cantidad de personas migrantes que viajan en familia y cruzaron la frontera desde México superó los 25 000, la cifra más alta que se haya registrado en Estados Unidos.

Recuerda el Times que la crisis sobre la cual advertía el presidente estadounidense, desde hace tiempo empieza a tomar forma a lo largo de los más de 3000 kilómetros de frontera con México. La red de seguridad fronteriza creada durante varias décadas para gestionar la llegada de grandes cantidades de varones migrantes solteros ha quedado sobrepasada por el arribo cada vez mayor de mujeres y niños en los últimos años.

El hacinamiento en albergues y otras instalaciones improvisadas, el riesgo de enfermedades entre los inmigrantes, así como la liberación de migrantes sin control en ciudades fronterizas, son el resultado de que la administración Trump no haya destinado recursos para crear condiciones en los centros de tramitación y visado.

Trump ha apostado por la opción de las medidas más severas con el ánimo de disuadir la migración, y eso ha provocado la llegada cada vez mayor de familias, que incluyen niños y mujeres, que luego se sienten atrapados dentro de un mecanismo donde la separación de los menores puestos en jaulas ha exacerbado aún más la caótica situación.

Recuerda el Times que la cantidad de detenidos en los centros del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) ha alcanzado su punto más alto en la historia; cifras de la agencia indican una población promedio de 45 200 adultos solteros y familias nucleares en detención por día.

La propia publicación pone el ejemplo del poblado de Yuma, en Arizona, donde el 87 por ciento de los migrantes detenidos durante el año fiscal en curso viajaban como parte de una familia, y la mitad de ellos eran niños.

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