Trump contra los veteranos de guerra
13 de mayo de 2025
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Entre las noticias sorprendentes que llegan en los últimos tiempos procedentes de Estados Unidos y particularmente acerca de las acciones de la nueva Administración gubernamental que llegó hace poco más de 100 días -período inicial que sirve para muchas caracterizaciones de su gestión- resultan los drásticos recortes en los presupuestos federales de muchos servicios sociales tradicionales e históricos que, hasta ahora, servían para mostrar algún aspecto positivo de la gobernación del país imperial en beneficio de sus ciudadanos.
Entre esos recortes, para sorpresa de muchos, se encuentran los relacionados con el departamento de Veteranos de Guerra, una vertiente considerada hasta hoy como intocable o sagrada para cualquiera de los dos partidos tradicionales o de las administraciones que hayan pasado por la Casa Blanca.
En un país que durante los últimos casi 80 años se ha visto constantemente en guerras de agresión e intervenciones militares en diferentes regiones del mundo -cumpliendo su autoasignada gestión imperial- es lógico que el caudal de “veteranos de guerra” aumente exponencialmente y acumule altas cifras, incluyendo aún los fallecimientos por edad y otras causas.
Razón para que ese grupo social aumente, reclame sus derechos y sea respetado por los distintos gobiernos, que evitan enfrentarlos y mantienen sus derechos constitucionales.
Donald Trump -quién no ha sido “veterano” de ninguna guerra- sin embargo, ha decidido enfrentarlo y lo ha incluido en su larga lista de recortes presupuestales que ya llega a más de 200 mil desempleados federales, de los cuales 70 mil corresponde al Departamento de Veteranos de Guerra, según se dio a conocer.
Tan elevada cifra puede ya suponer la gran cantidad de dificultades que confrontará el citado Departamento en cuanto a su gestión gubernamental en beneficio de los veteranos y sus familiares. Se trata de una agresión inaudita e inesperada que seguramente costará mucho en popularidad y sumará mayor desaprobación a la que ya viene sumando Trump en miopes decisiones de política interna, que muchos atribuyen a la asesoría del empresario Elon Musk.
Las recientes encuestas muestran al actual Presidente con las cifras de aprobación más bajas en 100 días de mandato en los últimos 70 años de historia del país y se avizora que seguirán descendiendo por ese camino, lo cual pone en vilo al Partido Republicano para futuros comicios legislativos y aún presidenciales de 2028.
El ataque contra los “veteranos de guerra”, que incluye desde generales hasta soldados, reservistas y sus familiares, sienta un precedente que incidirá sin falta en ese declinar de aprobación, dentro de un sector tan sensible e influyente.
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