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Terroristas con cascos blancos

31 de agosto de 2018

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Para las próximas horas está anunciado el asalto del ejército sirio al último reducto de los terroristas financiados y entrenados por Estados Unidos y algunos aliados de la Organización del Tratado del Atlántico Norte en la provincia septentrional de Idlib.
Así se pudiera terminar la guerra de agresión iniciada hace siete años en Siria, con cerca de 400 000 muertos, once millones de desplazados y una infraestructura económica virtualmente destruida, sin contar los graves daños a patrimonios de la Humanidad, destruidos intencionalmente por los grupos proimperialistas, principalmente el Estado Islámico,
Empero habrá que esperar algo para poder asegurar el triunfo final del pueblo sirio, porque Estados Unidos, Francia y Gran Bretaña amenazaron con bombardear puntos estratégicos de la nación árabe, con igual pretexto con que actuaron vandálicamente en ocasiones anteriores: falsos ataques químicos del ejército sirio a la población, algo sin pies ni cabeza, cuando los soldados van a liberar el territorio supuestamente envenenado.
Para lo primero ya hay varios buques en las cercanías de las costas sirias, y la aviación estratégica con sede en una base norteamericana de Qatar. Para lo otro, el fabricado ataque químico, ya están en el terreno los ya utilizados Cascos Blancos, quienes no son más que mercenarios utilizados falsamente como personal humanitario, pero que son duchos en disímiles y complejas actividades relacionadas con el terrorismo.
En una acción parecida, Israel, a petición de EE.UU. evacuó a 800 Cascos Blancos en abril pasado de laregión de Gupta, a los que trasladó a Jordania, luego de ser liberada la región.
Lo cierto es que tal entidad es amparada financieramente en varios estamentos de la Unión, y solo en el Congreso le fueron destinados casi siete millones de dólares, para algunos gastos, porque la mayoría permanece en el anonimato.
Paracolmo, Hollywood premio un filme dedicado a los Cascos Blancos, presentados como los salvadores de los pobladores de una nación como Siria, en medio de imágenes trágicas, impactantes, perfectas como pretexto para una operación.
Si a veces la industria del “entretenimiento” de Hollywood ha de servirnos de guía que refleje los rincones más oscuros de la psiquis enferma de los Dueños del Poder Global, podríamos decir que los gobernantes occidentales están actuando el drama hollywoodense de aquella famosa película, “El planeta de los simios”.
Estos Cascos Blancos, grupo que se presenta como de voluntarios, bajo el nombre de Defensa Civil Siria, no tiene nada de voluntario, ni civil, ni siria, porque lo conforman generalmente individuos de otras nacionalidades, bien pagados y entrenados en el arte de matar.

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