Puso “pie en polvorosa”
6 de noviembre de 2019
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«Viajaré a la Paz para entregarle una carta al presidente Evo Morales para que firme su renuncia. Estoy seguro que regresaré con ella firmada». Palabras del oligarca opositor santacruceño, presidente del Comité Pro Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, quien ha sido capaz de «dar un ultimátum» al vencedor en los comicios del 20 de octubre.
Pero el tiro le salió por la culata, cuando a su llegada al aeropuerto internacional del Alto, lo recibió una manifestación de pueblo, de cientos de mineros, indígenas, campesinos, todos dando Vivas a Evo y rechazando al incendiario opositor, capaz, además, de pedir la intervención de la fuerza militar para «sacar a Evo del poder».
El propio mandatario boliviano había denunciado desde la pasada semana que un golpe de estado se estaba preparando, luego que la oposición, primero ignoró el resultado de las elecciones, luego dijo que había fraude y por último se opuso y no participó en una auditoría internacional para revisar boleta por boleta, voto por voto.
Finalmente, los opositores se olvidaron del inventado fraude y piden la renuncia de Evo.
Lo que quizás Camacho no esperaba es que a su arribo al aeropuerto del Alto, tuvo que ser protegido por un gran operativo de seguridad.
Finalmente el personaje en cuestión —al estilo de Juan Guaidó en Venezuela—puso «pie en polvorosa» y fue evacuado por vía aérea hacia su guarida en Santa Cruz.
De la carta de renuncia que llevaba para Evo, que aseguró sería firmada por el presidente, no se ha dicho nada nuevo.
La frustración de ver a todo un pueblo en los alrededores de la terminal aérea, no para recibirlo a él, sino para reafirmar su apoyo al mandatario, ese que la oligarquía odia, más que todo por ser indígena fue un porrazo a la cara contra sus propósitos.
«Ante la llegada del señor Luis Fernando Camacho al Aeropuerto Internacional de El Alto del departamento de La Paz, se dispuso la movilización de efectivos policiales para garantizar y resguardar la vida e integridad física del mismo», confirmó un comunicado institucional.
Por su parte, Servicios de Aeropuertos de Bolivia (Sabsa) comunicó que las operaciones se desarrollaron con normalidad durante el incidente y que «aplicó todos los protocolos y procedimientos de seguridad» para «garantizar y proteger la vida e integridad física» de Camacho.
«¡El Alto de pie, nunca de rodillas!», corearon ciudadanos que llegaron al aeropuerto, quienes expresaron su repudio a Camacho por los hechos de racismo y violencia que ha provocado su discurso al impugnar el triunfo de Morales en las pasadas elecciones presidenciales del 20 de octubre, refiere un despacho de la agencia EFE.
La Central Obrera Boliviana se ha incorporado masivamente a las manifestaciones de apoyo a Evo, mientras que las redes sociales han sido inundadas con frases de rechazo al opositor Camacho, al que llaman «el verdadero fraude».
Mientras, el presidente Morales expresó «absoluta confianza» en las Fuerzas Armadas.
En tanto, el canciller boliviano Diego Pary, en una reunión extraordinaria del Consejo Permanente de la OEA, en Washington, afirmó que «la agresión selectiva de la ciudadanía y a las fuerzas de seguridad, el llamamiento a levantarse a las Fuerzas Armadas y a la Policía Nacional, y finalmente la conminatoria bajo amenaza al presidente Evo Morales de dejar el gobierno en 48 horas, son claras evidencias de que hay un golpe de Estado en camino».
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