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¿Para qué guerra se prepara la OTAN?

30 de junio de 2015

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Las más recientes informaciones divulgadas  por la prensa europea son alarmantes en cuanto a los aprestos bélicos de la alianza político-militar de la OTAN, que componen hoy 28 países de diversa influencia y magnitud en su seno pero cuyo accionar es regido indudablemente por Estados Unidos, cuyo presidente tiene la facultad de designar periódicamente al comandante en jefe de la citada Alianza; siempre debe ser un general estadounidense, tal como quedó establecido desde su fundación y aparece en sus estatutos. Para que no haya dudas.

Se anuncia con su gran bombo que pronto se llevarán a cabo “los mayores ejercicios de la OTAN desde el final de la guerra fría”, o sea, desde la desintegración de la URSS y el campo socialista europeo. Lo que no se aclara es por qué ahora se desarrollan tales preparativos guerreros, cuando el supuesto enemigo que justificó la existencia misma de la OTAN desapareció hace más de veinte años.

Tales ejercicios llevan ya el nombre de “Trident Juncture 2015” y se escenificarán en territorios pertenecientes a Italia, España y Portugal desde el 28 de septiembre hasta el 6 de noviembre, habiéndose divulgado igualmente que incluirá a 35 mil soldados, 200 aviones y 50 buques de guerra, así como una representación de las industrias militares de 15 países que “evaluarán las necesidades industriales” requeridas para un eventual enfrentamiento y las posibilidades de modernización del armamento, siempre crecientes, para servir al complejo militar-industrial.

La propia OTAN ha declarado que “Trident Juncture 2015” se propone una “alta visibilidad y credibilidad” y que su objetivo es poner a prueba por vez primera y de manera conjunta la recién creada “fuerza de respuesta” de 30 mil hombres instalada en los países del Este de la Alianza (frente a Rusia) y la “punta de lanza” de esas fuerzas consistente en 5 mil soldados de avanzada.

Según publicó The New York Times el 13 de junio, este contingente que será pre posicionado contará con suficiente armamento de última generación y deberá estacionarse en siete naciones ex socialistas del Este europeo: Lituania, Letonia, Estonia, Polonia, Rumania, Bulgaria y Hungría.

Tanto los comandos, bases aéreas y navales que, bajo la sombrilla de la OTAN, están instaladas en Italia, España y Portugal están llamados a jugar el más activo papel en estos ejercicios. Ello explica, por ejemplo, que el llamado Comando Conjunto Nápoles tendrá una actuación central bajo el mando del almirante estadounidense Use Ferguson.

Como todo indica que “Trident Juncture 2015” no es nada casual y forma parte de una estrategia de guerra generalizada, la alarma cunde ya en países europeos, -como Italia,- que conocen y han sufrido la devastación y la muerte como consecuencia de las guerras. El imperialismo norteamericano, mediante la maquinaria siniestra de la OTAN, pudiera convertir nuevamente a la vieja Europa en escenario de una conflagración que, esta vez, serían comparativamente más terrible y destructora que todas las anteriores que ha vivido ese continente.

Ojalá “Trident Juncture 2015” pueda servir para que los estadistas europeos de estos momentos no ignoren la historia y tomen conciencia de lo que pudiera sobrevenir.

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