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La verdad sobre la crisis del Medio Oriente: Aquellos polvos… Trajeron estos lodos

16 de octubre de 2023

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Respecto a la grave crisis humanitaria, bélica y de todo tipo que vive hoy el Medio Oriente como consecuencia de los graves y sangrientos enfrentamientos entre palestinos e israelíes en la región comprendida alrededor de la llamada franja de Gaza -territorio bajo soberanía palestina a partir de los Acuerdos de Camp David y Oslo y sede con posterioridad del movimiento Hamas -que lo gobierna y administra -pudiera repetirse la añeja y conocida frase que se corresponde a situaciones como esta: “Aquellos polvos…trajeron estos lodos”.

Así ocurre en efecto en el Medio Oriente desde hace 75 años, cuando concluyó la Guerra Árabe Israelí de aquellos momentos y debió proceder a concretarse la negociación conducente a la creación de dos estados (uno palestino y otro israelí) donde cada una de las partes contendientes pasara a coexistir pacíficamente con su vecino y ambas hicieran lo posible por consolidar un ambiente de cooperación al que también debían contribuir los países árabes, que habían participado en aquella contienda. El Consejo de Seguridad y la ONU debían servir como fiadores y garantes de todo ese proceso, que sería seguramente difícil pero realizable si había buena voluntad por parte de todos.

El gobierno imperialista de Estados Unidos, sus asociados en el estado sionista de Israel y los medios de comunicación a su servicio tratan ahora de manipular y confundir a la opinión pública de sus países y del mundo acerca de los orígenes y el desarrollo de la tragedia que ensombrece una vez más a esa parte del planeta que es el Medio Oriente, región codiciada desde tiempo inmemorial por su ubicación geográfica y sus inmensas riquezas energéticas de gas y petróleo.

Se pretende así ocultar la justeza reconocida universalmente de la causa palestina y sus derechos pisoteados y sometidos a una ocupación ilegal y al desalojo de sus tierras originarias mediante la fuerza bruta y el crimen generalizado.

Se pretende que el pueblo palestino no reaccione ante la injusticia y la expulsión de sus propias tierras, que doble las rodillas y admita como una verdad eterna la sentencia de Donald Trump: Que Israel es un solo estado y que los palestinos, si así lo desean, deben acostumbrarse a vivir dentro de él, donde serían ciudadanos de segunda en los territorios que les pertenecen histórica y legalmente.

Si en algún punto coinciden todos los sectores dentro del movimiento palestino es que tal pretensión es inadmisible y es necesario mantenerse levantados contra ella en las más diversas formas de lucha.

Si se trata de llegar hasta el verdadero origen del conflicto y determinar quién es el agresor y quién atacó primero, no cabe duda de que son los ocupantes sionistas y sus patrocinadores, que han impedido hasta hoy una solución justa y equilibrada del complicado asunto. Esa es la pura verdad que ha costado tanta tragedia y destrucción desde hace casi un siglo, millones de vidas de ambas partes que podían haber servido para engrandecimiento y progreso de todos los involucrados.

El mundo, sin embargo, está cambiando y ello puede dar lugar a que soluciones sensatas, justas y de buen juicio aparezcan en favor de la verdad y de la paz para el atribulado Medio Oriente y para la Comunidad Internacional en general. Deseémoslo y actuemos para que así sea.

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