Israel: Cada vez más pobres
10 de enero de 2014
|Ciudades israelíes han vuelto a ser escenarios de protestas sociales encabezadas por familias de trabajadores con hijos menores que exigen una transformación que reduzca la inequidad y aligere las cargas económicas que recaen principalmente sobre las capas medias y bajas de una nación desarrollada en varias ramas y sustentada por Estados Unidos y la rica diáspora que viven allí y en otros lugares del planeta.
La desigualdad social aumentó el pasado año, cuando ya en el 2012 más de un millón 750 000 israelíes, entre ellos uno de cada tres niños y la cuarta parte de la población vivían en el umbral de la pobreza.
Entre los dos colectivos más afectados se encuentran el de la minoría árabe-israelí, o sea, palestinos que se quedaron a vivir en Israel después de1948, y el de los ultraortodoxos, que generalmente tienen un gran número de hijos y solo trabaja un cónyuge, por tradición.
No obstante, el Instituto israelí de Seguridad Social admite que a pesar de que en muchos casos ambos cónyuges laboran, sigue aumentando la pobreza.
No es algo festinado decir que el futuro será más sombrío, porque la clase media está desapareciendo, se incrementa la brecha entre ricos y pobres, ya hay 26% de ancianos viviendo en esa lamentable condición, el 9% de los niños recurre al robo para comer y ayudar a su familia, y el 29% abandonó la escuela.
Es decir, un miembro de los países desarrollados ya tiene índices de pobreza como cualquier nación subdesarrollada, y la tendencia es a empeorar, como lo demuestra el recurrido suicidio por fuego al que recurren desesperadamente algunos de los ciudadanos.
Pero esta no es una cuestión nueva, sino que se remonta a 12 años atrás, y se agrava por la crisis económica mundial y la política neoliberal del actual régimen sionista.
El 75% de los israelíes teme un colapso económico y social, además de tener la preocupación por la educación y los problemas de seguridad, cuestión que ha servido de válvula de escape oficial para aumentar la represión contra los palestinos en los territorios ocupados, con mayoritaria aquiescencia de la ciudadanía israelí.
Al igual que en el 2012, encuestas revelaron que la mitad de los interrogados compraron menos alimentos el pasado año, debido a sus problemas económicos, 15% de ellos tuvieron que recurrir a un empleo adicional para aumentar sus ingresos y un 18% debe dinero a los bancos.
Pero esta situación trasciende Israel y llega a Estados Unidos, donde solo en Nueva York la pobreza entre los residentes judíos se incrementó en casi uno de cada cinco hogares judíos considerados pobres.
La proporción de hogares pobres judíos es mayor de lo que era hace diez años. El aumento relativo es especialmente dramático en los suburbios, donde hace una década no había pobreza judía.
Un estudio indicó que alrededor de un 19% de los hogares judíos es pobre, un aumento considerable desde el 2002, cuando era de 15%. No importa donde sea, si en el propio Israel o en Estados Unidos, específicamente Nueva York, el incremento de la desigualdad golpea cada vez más a una población que se consideraba afortunada.
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