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Francia: todo se decide el 24

11 de abril de 2022

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Domingo electoral en la República Francesa, donde para algunos analistas y medios de prensa, se dirimía entre la subida de la abstención, el ascenso de la ultraderecha o la continuidad gubernamental del actual mandatario.

Casi 49 millones de votantes convocados. Unos 70 000 centros de votación abiertos de 8 de la mañana a 8 de la noche. Un 22% del electorado que decidió por la abstención.

La coincidencia de circunstancias como la ascendente crisis económica mundial, el crecimiento de la llegada de inmigrantes al país galo, la guerra en Ucrania y el papel nada favorable a la paz por parte de una Unión Europea más cercana al paraguas estadounidense cuyo lenguaje y accionar es totalmente belicista y confrontación, son componentes de una realidad cuyo porvenir es incierto.

Quizás sean estos elementos los que han determinado que la diferencia en los sondeos previos al ejercicio electoral, entre el favorito y actual mandatario Emmanuel Macron, y la candidata de la ultra derecha, Marine Le Pen, se haya acortado a poco menos de 3 puntos, lo que hace coincidir en que nunca la ultraderechista ha estado tan cerca del Palacio de Elíseo.

De acuerdo con analistas de prensa del Viejo Continente, en este contexto se abrían escenarios posibles, aunque el primero de ellos coincidía en que ganaran los dos primeros lugares Macron y Le Pen, con poca diferencia.

Por su parte, el izquierdista Jean Luc Mélenchon, resultó tercero en la votación, mientras los otros candidatos, hasta la cifra de doce, obtuvieron cifras no significativas.

Finalizado el conteo, la porfía se concentraba entre Macrón y Li Pen, que serán los encargados, el próximo 24 de abril en segunda vuelta, de obtener la mayoría necesaria para decidir quién será el presidente del país.

La campaña, en sus últimas semanas se concentró en temas como el energético y la situación creada a partir de las sanciones contra Rusia y la interrupción europea de la compra de gas y petróleo de ese país.

En igual sentido, la población francesa tuvo en el centro de su problemática actual el encarecimiento de los productos básicos, fundamentalmente de la comida, así como las protestas de quienes, como los chalecos amarillos, han tenido en jaque a la actual administración por no encontrar fórmula alguna que mejorara las condiciones de vida del pueblo.

En esta oportunidad como en elecciones anteriores, Li Pen, una eterna líder de la ultraderecha francesa, conocida por su discurso que expira nostalgia nazi y antisemitismo, tuvo un alarmante ascenso entre las preferencias de voto, de acuerdo con las más recientes encuestas de las dos últimas semanas.

¿Llegará esta vez a la presidencia en la segunda vuelta? Esa será la incógnita que solo se despejará en la nueva cita con las urnas dentro de dos semanas.

Este lunes, ya contabilizado el 100% de los votos, Macrón había obtenido un 27,84%, mientras Li Pen llegaba al 23,15%. En tercer lugar avanzó el izquierdista Jean-Luc Mélenchon con el 21,95 % de los votos.

En mi opinión, estas próximas dos semanas hasta la cita con las urnas el 24 de abril, serán de un ambiente de incertidumbre, en el que ambos contrincantes tratarán de de convencer, principalmente a los indecisos que se abstuvieron, para que sumen votos a favor de uno u otro de los llegados a la cita definitiva.

Sin esperar mucho tiempo por recomenzar su campaña, Li Pen, dijo que «percibe la esperanza  de que las fuerzas de recuperación del país se están levantando. Todos los que hoy no votaron a Emmanuel Macron están llamados a sumarse a nuestra manifestación», agregó la candidata en su mensaje al pueblo francés.

En todo caso, esperar será la única posibilidad para conocer uno u otro desenlace.

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