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Fidel en Santiago

26 de julio de 2018

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Era temprano, muy temprano, este jueves 26 de julio del 2018, cuando en Santiago de Cuba, tal y como ocurrió en esa fecha del año 1953, el antiguo cuartel Moncada se convirtió en centro de noticias, pero esta vez, no para contar muertos provocados por la barbarie de los militares batistianos, sino para recordar aquella clarinada con la que santiagueros y cubanos todos, se alistaron entre los seguidores de quien encabezara aquel “asalto al cielo”, el invicto Comandante en Jefe.

Allí, se sentía a Fidel, quien dirigiera las acciones del Moncada, y, muy cerca del lugar, y cuando los tenues rayos de sol de esta mañana, lo permitía, se podía percibir la cercana serranía, la misma que le daría cobija en su bregar guerrillero.

Hoy, subrayó Raúl, a 65 años del Moncada, con la independencia ya conquistada y la presencia permanente de Fidel entre nosotros, podemos afirmar que por grandes que sean los desafíos, nuestro pueblo defenderá su Revolución socialista. La historia ha demostrado que sí se pudo, sí se puede y siempre se podrá.

Cuando Raúl dijo en esta mañana del 26 que “por grandes que sean los desafíos, nuestro pueblo defenderá su Revolución socialista”, a nuestra mente llegó aquella histórica frase de Fidel, pletórica de optimismo y confianza, cuando se reagruparon algunos de los expedicionarios del Granma luego del combate de Alegría de Pío, y siendo informado que eran 12, expresó: “ahora sí ganamos la guerra”.

Tras varios años de combates, victorias y algunos reveses, el Ejército Rebelde comandado por Fidel, con su Segundo Frente comandando por Raúl, Tercer Frente bajo la conducción de Almeida y dos columnas atravesando el país de oriente a occidente, dirigidas, una por el comandante Camilo Cienfuegos y otra por el Che Guevara, la vida demostró que “sí se podía”.

El propio Raúl, participante directo de aquella gesta, inició sus palabras de este 65 aniversario, advirtiendo que “ninguno de los que tuvimos el privilegio de participar en las acciones del 26 Julio, bajo el mando de Fidel, podríamos entonces soñar que estaríamos vivos un día como hoy, con un país libre, independiente y soberano, una revolución socialista en el poder y un pueblo unido, presto a defender la obra realizada, fruto del sacrifico y sangre derramada de varias generaciones de cubanos”.

Hoy la presencia de Fidel se puede palpar en cada lugar de la indómita ciudad. Aunque sus cenizas están protegidas en un monolito de piedra en ese santuario grande que es el Cementerio Santa Ifigenia, su vida y su obra constituyen referencias imprescindibles para celebrar una fecha como esta y también para evaluar el rumbo del camino iniciado en el Moncada.

Recuerdo las decenas de visitas de Fidel a Santiago, que siempre es Santiago. A la provincia y especialmente en la Ciudad Héroe acudió una y otra vez. Habló en actos, inauguró obras sociales y económicas, compartió con sus habitantes…

En el acto de este 26, Raúl reconoció el entusiasmo de los santiagueros, pero advirtió que aún queda mucho por hacer en la esfera productiva y de los servicios para seguir elevando la calidad de vida del pueblo.

El propósito, recalcó, es hacer de Santiago una ciudad más bella, disciplinada, higiénica y ordenada, digna de custodiar los restos de nuestros mejores hijos, entre los que sobresalen el Héroe Nacional, el Padre y la Madre de la Patria y el Líder Histórico de la Revolución cubana.

Recordó Raúl lo expresado por Fidel: Nuestros muertos heroicos no cayeron en vano, ellos nos acompañaron en las cárceles, y ellos combatieron junto a nosotros en la guerra y los vemos renacer en las nuevas generaciones…

Luego afirmó que “los revolucionarios, desde el 26 de Julio, hemos llegado hasta aquí sobreponiéndonos a reveses. Fidel, con el Moncada, nos enseñó a convertir los reveses en victorias y ya nada pudo contener el avance de nuestro pueblo. Nos mostró la fuerza de las ideas y la lección permanente de la perseverancia en los propósitos justos”.

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