ribbon

El “sacrificio” de los innobles

22 de septiembre de 2016

|

 

Por estos días se habla acerca de que los precios del petróleo han ido en aumento, luego de bastante tiempo de caída y sacrificio de los países monoproductores, generalmente en vías de desarrollo y con políticas progresistas.

No obstante, nada es seguro, y solo se basan en alguna que otra situación y convenios de a corto plazo entre naciones con diferentes status y política económica.

Cuando los precios del petróleo cayeron en picada, los medios informativos occidentales se apresuraron a explicar que ello se debía el aumento de la producción de petróleo no convencional en Estados Unidos, el enfriamiento de la economía mundial, especialmente debido al descenso de la demanda europea y asiática; y, por ultimo, que los conflictos en el Medio Oriente no han representado en una merma sensible de las respectivas producciones.

Aquí lo difícil sería creer que el gran capital global que encabeza Estados Unidos, se resignaría a perder una tajada de sus enormes ganancias.

Recordemos que en cada crisis, como la que desató el globo inmobiliario del 2008, el ente neoliberal se las arregló para sacar ganancias, y lo mismo sucede en medio de guerras que llevan a la extinción a pueblos enteros.

Araba Saudita, Qatar y Kuwait , de los primeros exportadores mundiales,  tienen reservas de divisas de tal magnitud que podrían estar años enteros sin exportar petróleo, y sin sufrir daños apreciables en sus economías.

Europa se beneficia con el desplome de los precios, pues cuando llega el invierno podrá pagar mejor y depender menos del gas y combustible rusos, y, por supuesto, Estados Unidos se beneficia enormemente al reducir casi a cero sus importaciones, lo cual mejora su maltrecha economía.

Pero tanto en aquel momento, comoahora, en el que han mejorado ligeramente los precios, las naciones más vulnerables son las exportadoras que no gozan de las simpatías del imperialismo: Venezuela, Rusia, Ecuador e Irán. Es mucha la “casualidad”.

Aunque no siempre los resultados esperados por el imperialismo son de su agrado, esta situación la aprovechó para tratar de minar la estabilidad de gobiernos indeseados, todo lo cual se suma a su arsenal de armas de presión, violencia, chantaje y juego sucio para imponer sus designios a escala planetaria.

Pero todo esto que parece tan abyecto como perfecto adolece de que sus propios gestores no quieren renuncias en mucho tiempo a las grandes ganancias.

En este contexto, numerosas prediccioneshan fallado, como que tal situación llevaría  alacaída inmediata del gobierno venezolano, y más cuando en Argentina ya detenta el poder un gobierno neoliberal, ungolpe de Estado parlamentario se acaba de consumar en Brasil y la contrarrevolución intenta, hasta ahora vanamente, de minar las bases sociales de los gobiernos de Bolivia y Ecuador.

Veremos quien gana en la lucha entre el capital parásito y explotador y los pueblos en revolución.

Comentarios