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El crecimiento del grupo BRICS

11 de enero de 2024

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Mientras el mundo actual va convulsionándose y se multiplican los conflictos armados, las agresiones y las sanciones de todo tipo, conformando un panorama cercano o semejante a una eventual y catastrófica tercera guerra mundial que las armas nucleares serían capaces de convertir en última y definitiva -según muchos científicos y respetados pensadores de los más variados signos ya han advertido- va creciendo con pasos lentos pero firmes y decididos la agrupación de países BRICS, que inicialmente integraron Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica.

En la misma medida en que el sistema mundial del imperialismo, los países que lo integran y su cabeza estadounidense van perdiendo autoridad moral e influencia política, ventajas económicas y capacidad de engaño al resto del planeta, hacen su aparición en diversas regiones los agrupamientos integracionistas que -con impulsos mayores o menores- se acercan e intercambian cada día más, como forma de eludir pasados sojuzgamientos, desventajas y sometimientos de las que fueron las potencias del pasado colonial y pretenden seguir siéndolo en la actualidad neoliberal.

El curso ineludible de tales realidades motivó el surgimiento del BRICS, que tomó por sorpresa a las prepotentes ex metrópolis al introducirse como una fuerza formidable y de perceptible peso e influencia en el escenario mundial, recibiendo una ostensible muestra de confianza y apoyo por parte del numeroso mundo de países en vías de desarrollo, que desde su fundación vio al Grupo como un asociado potencial que no busca explotación ni saqueo y se ajusta a reglas más generosas y limpias de cooperación.

Las diferentes Cumbres del BRICS ya efectuadas y el decursar de las relaciones establecidas y desarrolladas desde entonces muestran que el camino escogido y seguido hasta ahora es el correcto y ella es la razón por la cual se ensanche esa vía y se precisa el rumbo a continuar, primeramente entre ellos.

Un hecho trascendente y de gran impacto mundial acaba de producirse y es la confirmación de todo lo anteriormente expuesto: cinco países del notable peso en sus respectivas regiones han sido admitidos para integrarse plenamente en el Grupo, tras haberlo solicitado y ser acordado en rigurosos análisis por parte de los actuales componentes.

Ellos son Egipto, Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, Etiopía e Irán, que se suman a esta plataforma internacional caracterizada por el respeto, la colaboración y ayuda mutua, así como una eventual cercanía y comunidad en sus posiciones dentro de la arena internacional y los intereses generales del diálogo y la paz.

Se conoce que otros 30 países se encuentran actualmente gestionando o solicitando incorporarse a cualquier tipo de asociación o relación más cercana de vínculo con el BRICS, al que ven como una alianza de futuro justo y promisoria, sin arbitrariedades, ni abusos ni sanciones.

Mientras el sistema mundial del imperialismo, al que pertenece también Israel, se desgasta en guerras, genocidios, sanciones y otros crímenes, el Grupo BRICS se amplía, avanza y permite avizorar un promisorio futuro que pudiera ir más allá de su propia estructura y sus componentes, según se aprecia hasta el momento.

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