ribbon

Cumpleaños infeliz

5 de abril de 2019

|

 

Detrás de las sonrisas, las fotos de ocasión y el nivel que requería un setenta cumpleaños, los participantes en la reunión efectuada en Washington los días 3 y 4 de abril intentaron cubrir la crisis interna por la que atraviesan con ataques a la Federación Rusa como creadora de todos los males terrenales.

Los jefes de Estado de cada una de las naciones miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) decidieron que fueran sus ministros de Exteriores quienes participaran, quizás para no escuchar los regaños y reclamos del presidente estadounidense Donald Trump, quien antes y durante el encuentro recordó que los Estados Unidos exigían que todos pagaran el 2 por ciento del Producto Interno Bruto respectivo según lo acordado.

¿Cuáles fueron los resultados del encuentro? Nuevas advertencias a Rusia por lo que el secretario general de la organización, Jens Stoltenberg califica de “comportamiento desestabilizador que provoca que el mundo sea un lugar menos seguro”.

En ello se resume los dos días del encuentro, por lo menos la visión dada a la prensa, aunque dado el nivel de los participantes no pudo haber secretos o planes inmediatos a llevar a cabo, salvo lo que desde hace mucho tiempo se cumplen y son preocupantes porque sí desestabilizan el escenario internacional y hacen inseguro el planeta.

Para Mike Pompeo, secretario de Estado anfitrión, “No hay una alianza en el mundo con más poder que la nuestra”, mientras que para el Secretario General de la OTAN “nuestra alianza nos ha dado 70 años de paz y prosperidad, y estamos mejor preparados que nunca para responder a los desafíos”.

Aquellos que esperaban cosas concretas del cónclave, en especial los aliados, pueden haber quedado satisfechos con el anuncio de un paquete de medidas para “ampliar su presencia en el Mar del Norte y apoyar a Ucrania y Georgia en su defensa de las agresiones rusas”.

Entre las medidas, denunciadas reiteradamente por la Federación Rusa como provocadoras, están las de entrenamiento de fuerzas navales y ejercicios militares conjuntos. Hoy hay una unidad naval de la OTAN que está patrullando el Mar Negro y está haciendo ejercicios con barcos de Georgia y Ucrania”, anunció Stoltenberg.

Los anfitriones no perdieron la oportunidad para traer por los pelos dos temas que aunque no estaban en agenda son de su interés. La presencia rusa en Venezuela y la tensión entre la Alianza y Turquía, uno de sus miembros.

Pompeo fue categórico, los rusos deben salir de Venezuela y el vicepresidente Mike Pence, en referencia a la compra de Turquía de armamento ruso lanzó un ultimátum, elegir entre la Alianza “o arriesgar nuestra seguridad con decisiones imprudentes”.

En fin, son sencillamente las voces del imperio, que se tratan de imponer por la fuerza y con sus amenazas hicieron de este momento un cumpleaños infeliz.

Comentarios