ribbon

Premier mundial del poema sinfónico “El Moldava”, de Bedrich Smetana, como pieza independiente

29 de marzo de 2013

Como se sabe, el compositor checo Bedrich Smetana llevó a la práctica el proyecto más ambicioso del nacionalismo musical de carácter patriótico, a través de un monumental ciclo de seis poemas sinfónicos, bajo el título general “Mi patria”. Esos poemas, escritos entre 1874 y 1879, reflejan, cada uno, diversos aspectos del paisaje, la historia o las leyendas del país checo.
Y el segundo de esos poemas del ciclo se titula “El Moldava” o “Vltava”, e intenta describir el curso del río del mismo nombre a través de dos fuentes o saltos de agua, es decir, el Moldava frío y el Moldava caliente, que confluyen en un solo cauce.
El poema describe también el curso del río a través de los bosques y praderas de Bohemia, atravesando parajes donde se celebran alegres fiestas campesinas, específicamente una boda, con las trompas de los cazadores y las rondas de las ninfas de la foresta bajo los rayos de la luna. Al fondo, orgullosas ciudadelas, castillos y murallas en ruinas se alzan hacia el cielo.
El Moldava se estrecha en los furiosos remolinos de los rápidos de San Juan, y después, ensanchándose, va al encuentro de la ciudad de Praga. Allí se alza la ciudadela de Vishejrad y después de haber pasado majestuosamente a sus pies, el río desemboca en el Elba perdiéndose a nuestra vista.

El poema sinfónico “El Moldava”, como obra orquestal independiente, tuvo lugar en la ciudad de Praga, hace 133 años, UN DIA COMO HOY.