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Nace el compositor cubano Harold Gramatges

29 de marzo de 2013

Harold, como solemos llamarle sus amigos, discípulos y colegas, nació en Santiago de Cuba e inició allí sus estudios musicales, y fue un destacado discípulo de la profesora Dulce María Serret. Luego cursó composición en el Conservatorio Municipal de La Habana, bajo la guía de Amadeo Roldán y José Ardévol.
En 1942, Gramatges obtuvo una beca para el Berkshire Music Center de Tanglewood, y allí fue alumno de los insignes Aaron Copland y Sergio Koussevitsky. Por esos años, Gramatges fue miembro del Grupo Renovación Musical, constituido en La Habana bajo la animación y orientación de José Ardévol, e integrado por jóvenes compositores que se proponían incorporar a nuestra música las grandes formas universales, así como un tratamiento menos directo de los elementos estilísticos cubanos, que el que había predominado en Roldán y Caturla.
En 1951, Harold asume la presidencia de la recién fundada “Sociedad Cultural Nuestro Tiempo”, organización no gubernamental, de proyección socialista, que agrupó a jóvenes interesados en el desarrollo de la cultura y el arte en Cuba, y que se enfrentó a los regímenes corrompidos y proimperialistas tratando de hacer una labor de cultura popular. No obstante, la labor de Gramatges y de los integrantes de “Nuestro Tiempo” en pro de la cultura cubana fue, no sólo titánica sino ejemplar, y la simple reseña de sus actividades y del alcance cívico y cultural de las mismas, rebasaría con mucho el espacio de que disponemos.
Como creador, Harold Gramatges posee un catálogo de obras que abarcan los géneros sinfónicos y de cámara; música instrumental y coral; canciones y música para el teatro y el cine, y su evolución estilística ha seguido un curso coherente y espontáneo, desde sus primeros trabajos, allá por la década de 1940.
Cada una de las formas de lenguaje que Harold ha adoptado a lo largo de su extensa y fructífera trayectoria, se manifiesta en sus obras como un medio natural de expresión, sin las cicatrices o fracturas que, en ocasiones, deja la lucha por imponer la técnica a un contenido artístico. Su música ha obtenido numerosas distinciones nacionales y extranjeras, y ha recibido las más elogiosas reseñas por parte de la crítica especializada.
Y entre esas distinciones, es preciso destacar el Premio Iberoamericano de la Música “Tomás Luis de Victoria”, conferido a Harold en 1996, justo en el año de su creación, y que representa para los músicos lo que el Premio Cervantes para los escritores hispanohablantes. Además, el “Tomás Luis de Victoria” no se trata de un premio por una obra específica, sino por la obra total del compositor, por su proyección dentro del mundo de la cultura musical.
Harold Gramatges, una de las grandes figuras de la creación musical cubana contemporánea y personalidad indispensable en la cultura de nuestro país, nació en Santiago de Cuba, hace 89 años, UN DIA COMO HOY.