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Muere el compositor moravo Leos Janacek

29 de marzo de 2013

Considerado no sólo como una gran figura de la música checa, sino también uno de los artistas más relevantes del pasado siglo, Leos Janacek nació en 1854 y durante su juventud trabajó en Brno y luego estudió en Praga, Leipzig y Viena. De regreso a su patria se convirtió en profesor del recién fundado Conservatorio de Brno, que hoy lleva su nombre. Luego se dedicó a estudiar sistemáticamente el folklore moravo, y el fruto de esos trabajos se refleja en algunas de sus obras, como la Suite de danzas de Moravia y las Danzas de Laquia, que era uno de los distritos de Moravia.
Janacek no fue un vanguardista como los de su tiempo que rompieron los vínculos con el pasado. Del romanticismo le quedó siempre la tendencia a la descripción y al empleo de programas literarios, como lo demuestran muchas de sus grandes obras orquestales. Y es que muy pocas mentalidades de la música contemporánea pudieron resolver, de manera tan creadora, el equilibrio entre lo nuevo y lo tradicional, y entre lo popular y lo universal, como Leos Janacek.
Sus óperas Jenufa, Katia Kabánova, La zorrilla astuta, El Caso Makrópulos y De la casa de los muertos, son obras en las que se plantea, más que un simple conflicto dramático, una profunda indagación sobre aspectos de la naturaleza y la conducta humanas. De ahí que la música de esas obras se ligue al conflicto que plantea su trama con una presencia que dista mucho de ser un simple acompañamiento para el canto.
Leos Janacek maduró y definió su estilo artístico durante la primera década del siglo veinte. Ya había pasado su período folclorista, y la música popular se había asimilado a su lenguaje como una fuente elaborada y trascendida por el talento singular del compositor moravo.
Y de ese período de maduración es uno de sus poemas sinfónicos más conocidos. Me refiero a la Balada de Bláñik, que alude al monte donde tuvo lugar la batalla decisiva en la lucha de los husitas a favor de la reforma y la defensa de la identidad nacional.
En 1926, cuando contaba 72 años de edad y faltaban dos para su muerte, Janacek escribió su última obra orquestal, a la que dio por título Sinfonietta, y que es una obra sorprendente por su originalidad y la frescura de su inspiración.
Otra interesante característica de Janacek como compositor fue su atracción por la literatura rusa, la que, sin dudas influyó, con su realismo crítico, en la mentalidad del compositor. Y así, por ejemplo, para su ópera Katia Kabánova, Janacek se inspiró en La tempestad, de Ostrovsky; De la casa de los muertos es una ópera basada en la novela de Dostoievsky; y en una novela de Gogol se inspira su poema sinfónico Taras Bulba.
Leos Janacek murió en Óstrava, en 1928, UN DIA COMO HOY.