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El Héroe Nacional de Cuba se despide de su hijo

29 de marzo de 2013

El Apóstol de la independencia de Cuba, José Martí, amaba extraordinariamente a su hijo José Julián, nacido de su matrimonio con la camagüeyana Carmen Zayas Bazán. Por desavenencias entre los esposos (Carmen, no correspondía a los deberes de Martí con su Patria) padre e hijo habían estado separados muchos años de sus vidas, es así como al momento de partir el Héroe Nacional a la manigua en 1895, esta situación se mantenía.
A su único hijo había consagrado Martí los versos de Ismaelillo y la correspondencia con su unigénito fue frecuente, incluso el Apóstol en comentarios solía referirse a los rasgos caligráficos de “Pepito” que eran muy similares a los suyos.
Un día como hoy, el Héroe Nacional escribe una linda carta de despedida que está fechada en la fecha de la salida de la expedición Gómez-Martí de Montecristi, Jamaica, en la goleta Brothers.

“Hijo:
Esta noche salgo para Cuba: salgo sin ti, cuando debieras estar a mi lado.
Al salir, pienso en ti.Si desaparezco en el camino, recibirás con esta carta
La leontina que uso en vida tu padre.
Adiós .Sé justo.
Tu
José Martí “
En esta breve carta Martí hace alusión a su leontina de oro, requiriendo con el ofrecimiento de su reloj a su hijo, el uso de uno que sustituyera él que le había regalado el abuelo pro español y que tenía en su interior el escudo de España.
José Julián Martí, fue justo, siendo un joven de sólo diecisiete años, después de la caída en combate del patriota, fue a la manigua donde lucho como un mambí más y ganó medallas para la honra de su país.