Luces y sombras en Habana Radio

26 de enero de 2021

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Maria Karla Villar Mora

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Aniversario, Artes plásticas, Cuba, Cultura, Luces y Sombras

 

 

Habana Radio llega a su aniversario 22 con una programación que la define gracias a espacios radiales bien logrados, los cuales en su mayoría son realizados por un equipo de colaboradores muy comprometidos con el patrimonio y la cultura de Cuba. Dentro de la parrilla de programación, aun a sus 22 años, continúan al aire algunos espacios que han acompañado a la emisora en su crecimiento, y han crecido también con ella.

Es el caso de Luces y sombras, un programa de entrevistas a artistas visuales de nuestro país y que durante estas dos décadas ha sido creado por el destacado realizador radial Alexis Rodríguez, y la consagrada periodista Estrella Díaz.

 

 

Ambos nunca imaginaron que este espacio no solo les iba a dar la oportunidad de conocer a grandes artistas y sus obras, así como de las artes plásticas en sentido general, sino que también en este largo camino coincidirían con noveles artistas cuyos nombren figuran actualmente entre los exponentes más destacables de este arte en la Isla. Para conocer intimidades de este espacio fundacional en la voz del patrimonio cubano, Habana Radio conversó vía electrónica con Estrella Díaz.

 

¿Cómo y cuándo surge Luces y sombras como programa de Habana Radio?

El programa es uno de los espacios fundacionales de Habana Radio y se mantiene con el formato original desde que fue concebido. Se trata de un diálogo fluido con artistas visuales de todas las tendencias y generaciones y su objetivo esencial es promocionar el quehacer de esos creadores que se han mantenido cercanos al trabajo cultural que impulsa y desarrolla la Oficina del Historiador. Fue una propuesta que le realicé a la directora/fundadora de la emisora, Magda Resik, quien acogió la idea y me ha permitido estar por más de dos décadas sumergida en el maravilloso y complejo mundo de las artes plásticas.

 

 

He tenido la gran suerte de compartir, desde sus inicios, este proyecto con Alexis Rodríguez a quien considero uno de los mejores realizadores de la radio cubana. Su sensibilidad e impronta han contribuido sobremanera para que el espacio, que sin duda tiene un alto nivel de especialización, siga siendo de interés para toda la audiencia.

 

¿Durante estos años al aire cuánto han aprendido haciéndolo?

¡Muchísimo! En lo personal, me ha dado la oportunidad de asomarme a los más insospechados mundos creativos. Ha sido de un aprendizaje constante y, además, me ha permitido trabar amistad con muchos artistas y es algo que valoro enormemente. Igualmente, me ha obligado a estudiar, a estar al día y al tanto de lo que sucede a nivel internacional en esta esfera. En otras palabras: estar informada.

 

 

¿Cuántos proyectos personales y profesionales ha visto realizados o ha podido realizar por y a través de este espacio?

Uno de los aspectos que más pondero de Luces y sombras es que se ha movido a varios lenguajes, en varias cuerdas. Nació como espacio radial y al surgir la comunicación digital, me obligó a llevar la palabra del éter a la escritura, ejercicio de gran importancia porque aunque la radio es un medio que estimo altamente, si te acomodas pierdes la destreza de la escritura. Al surgir el sitio web de Habana Radio (www.habanaradio.cu) me vi obligada y estimulada a escribir más. Gracias a ese empeño han visto la luz dos libros (Ediciones La Memoria y Ediciones Boloña) que atesoran una selección de entrevistas todas radiadas en el espacio. También, Luces y sombras es un espacio multimedial que ha “saltado” a la imagen en movimiento: al crearse la Productora de Audiovisuales de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana propuse a nuestra directora hacer una serie de monográficos de 27 minutos, una especie de catálogo promocional del arte contemporánea cubano. Hasta el momento se han realizado 21 documentales de la mencionada serie, algo que me ha abierto otros horizontes comunicativos.

 

 

¿Qué cambiaría del programa y de la emisora en general?

Del programa: Siento que es demasiado capitalino, demasiado centrado en los artistas habaneros o aquellos que llegan de visita a La Habana. Siempre que tengo la posibilidad intento reflejar lo que en materia de artes visuales se realiza en todo la Isla, ¡que es mucho! Pero eso es solo una pretensión que muchas veces es imposible materializar. Me encantaría tener la posibilidad de viajar más a provincia, pero dada las circunstancias es una realidad que se torna inaccesible.

 

 

De la emisora: que se escuchara mejor, que la calidad de la transmisión fuera más nítida, que se fuera más cuidadoso a la hora de seleccionar lo que se pone al aire: muchas veces he escuchado, con gran tristeza, entrevistas o intervenciones que, desde el punto de vista del contenido son ¡fabulosas!, pero que no se tiene el cuidado necesario a la hora de grabar el sonido: eso es responsabilidad, fundamental, de los reporteros. Por mi experiencia personal, sé que en ocasiones es incómodo grabar, pero es inadmisible que un reportero no se esmere por encontrar el mejor sitio para hacer una grabación con la calidad requerida o que simplemente desde su asiento “ponche” su grabadora sin tener en cuenta que el resultado será en un tercer o cuarto plano. Eso me irrita mucho y me parece una falta de respeto con el oyente y una tremenda falta de responsabilidad ante la profesión.

 

 

¿Qué retos tiene por delante el programa dentro de la parrilla de una emisora como Habana Radio?

Considero que uno de los retos más significativos es lograr que el programa mantenga su lozanía y actualidad. Es un espacio que he tratado que se parezca a los entrevistados. Ese, creo, es uno de sus secretos y logros: cada emisión de Luces y sombras es un acto de responsabilidad y respeto hacia la obra y sus protagonistas.