La responsabilidad de comunicar el patrimonio

2 de junio de 2022

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Daniel Benítez Pérez

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Colegio Universitario San Gerónimo de La Habana, Cuba, Cultura, Eusebio Leal Spengler, Oficina del Historiador de La Habana, Patrimonio, Plan Maestro

 

 

Ha cobrado más valor el hashtag #PeriodismoResponsable, promovido por el Décimo Diplomado Internacional “Medios para Comunicar el Patrimonio”, que celebró este 2 de junio su cuarta jornada en el Colegio Universitario San Gerónimo de La Habana. La que parecía la tarea más sencilla, la de comunicar los esfuerzos extraordinarios que se realizan para preservar el patrimonio cultural en Cuba, ha mostrado ser igual de decisiva para la continuación de una misión, noble como pocas: Preservar la herencia recibida de nuestros ancestros y legarle aún más a las nuevas generaciones.

Este Diplomado Internacional se realiza con el apoyo del proyecto de cooperación “Promoviendo el desarrollo integral de La Habana Vieja para el disfrute y preservación del patrimonio, con herramientas de comunicación para la transformación social”, que fue realizado de conjunto con la KCD ONGD y con financiamiento de la AVCD.

 

 

La primera conferencia correspondió al M.Sc. Nilson Acosta Reyes, quién abordó las políticas culturales para la protección del patrimonio en Cuba. El también presidente de la Comisión Nacional de Monumentos y vicepresidente del Consejo Nacional de Patrimonio Cultural del Ministerio de Cultura, afirmó que resulta fundamental para la ejecución de estas políticas el funcionamiento de los museos como célula fundamental de trabajo. Es decisiva la identificación y protección del patrimonio, ya sea natural, monumental o inmaterial. La protección del patrimonio va más allá del combate contra el maltrato y el tráfico ilícito de los bienes patrimoniales, sino que abarca además la promoción de los elementos más representativos de la cultura nacional y la formación de los valores patrios en los más jóvenes.

 

 

Debido a que la protección del patrimonio nace desde la sociedad, Nilson Acosta destacó que el trabajo de los comunicadores es fundamental para crear conciencia en el público y convertir a los ciudadanos en coprotagonistas de la conservación del patrimonio.

 

 

Un espacio importante de la clase estuvo dedicado a la nueva Ley General de Protección al Patrimonio Cultural y al Patrimonio Natural, la cual se pondrá en ejecución en 2023. Dentro de las novedades de esa norma está la de articular en una única ley a la protección del patrimonio natural y el cultural. También reconoce y regula la salvaguarda del patrimonio inmaterial. Además, actualiza las disposiciones de la importación y exportación del patrimonio, e incorpora disposiciones relativas a las convenciones internacionales. Y resulta muy importante su reorganización del sistema nacional de museos y de las comisiones asesoras.

 

 

Tras un breve receso, llegó el turno de la Dra. Patricia Rodríguez, Directora del Plan Maestro, quien expuso acerca del Modelo de Rehabilitación Integral del Centro Histórico de La Habana, en particular, sobre las experiencias de la Red de Oficinas del Historiador y del Conservador de las Ciudades Patrimoniales de Cuba.

La Dra. Rodríguez compartió cómo Eusebio Leal siempre distinguía entre la utopía y la fantasía, pues él consideraba a la primera como un sueño de lo posible, y por lo que trabajaba todos los días. Al mostrar el estado de deterioro en que se encontraba el Centro Histórico habanero durante la década de 1980, y comprobar todo lo que se ha podido rescatar del olvido y la destrucción en la actualidad, se puede admirar la visión del eterno Historiador de la Ciudad de La Habana. “Eusebio sabía mirar con los ojos del corazón”, afirmó la Dra. Rodríguez con una emoción que contagiaba.

 

 

Al hablar del desarrollo integral de la gestión del Centro Histórico, la también secretaria ejecutiva de la Red de Oficinas del Historiador y del Conservador de las Ciudades Patrimoniales de Cuba, destacó los cinco pilares en el que este actividad se sustenta. La dimensión institucional ve a la gobernanza como condición imprescindible de cualquier progreso. La dimensión económica aborda a la cultura como un activo económico. La dimensión cultural ve que la cultura es el eje vertebrado del desarrollo. La dimensión social considera al ser humano como el centro de toda obra creadora. Y la dimensión ambiental considera que lo cultural, lo humano, debe coexistir con lo natural.

Con el recuerdo infinito de la memoria del eterno Historiador y a su obra, Patricia Rodríguez recordó cómo Eusebio Leal, al hablar de la cúpula dorada del Capitolio, dijo que era una corona que la Oficina del Historiador le iba a regalar a la Ciudad de La Habana en su 500 aniversario.

 

 

La última conferencia del día le correspondió al Ing. Arsenio Sánchez, coordinador general de la Red de Oficinas del Historiador y del Conservador de las Ciudades Patrimoniales de Cuba. Su ponencia se inició con la muestra del video “Una red necesaria”, dónde se escucharon las palabras de algunos de los protagonistas del desarrollo en las ciudades patrimoniales, como la Dra. Patricia Rodríguez y Eusebio Leal Spengler, además del Historiador de Bayamo, Ludín Fonseca, y el Historiador de Baracoa, Alejandro S. Hartmann, entre otros.

 

 

El ingeniero Arsenio Sánchez destacó que en estos momentos existen en Cuba 11 Oficinas del Historiador y del Conservador, y la más joven de todas es la Oficina del Conservador de Viñales, la cual fue aprobada en febrero del 2022. También destacó que desde 2018, toda nueva Oficina que se cree va a ser una Oficina del Conservador, y no del Historiador.

Para el coordinador general fue muy importante precisar que la cultura es un proceso, las declaratorias legales son un punto de partida, que el reto siempre va a ser el de proteger y preservar lo que se tiene, y la misión más importante es la de legar ese patrimonio a las nuevas generaciones. También destacó que el 32,6% de la población cubana vive en una de las 16 ciudades patrimoniales del país, por lo que la conservación de estos espacios patrimoniales tiene consecuencias en un sector importante de la nación.

 

 

A pesar de haber sido creada en 2008, la Red de Oficinas del Historiador y del Conservador de las Ciudades Patrimoniales de Cuba ha conseguido importantes resultados. Entre estos logros se encuentra la recaudación de 100 millones de dólares a partir de la cooperación internacional. También se haya la creación de 8 Escuelas Taller en 7 provincias. La creación del Colegio Universitario San Gerónimo de La Habana. La creación de 7 gabinetes de arqueología y de 8 planes maestros. Pero más allá de los numerosos reconocimientos y premios que ha recibido, la mayor importancia es la de haber preservado las tradiciones y de haber recuperado inmuebles, de haber protegido al patrimonio.

 

 

Resulta inolvidable la afirmación de la Dra. Patricia Rodríguez: “Los comunicadores tienen la responsabilidad de transmitir la verdad. De filtrar el caudal hasta volverlo potable para el gran público, hasta que pueda sensibilizar a la gente”. Y tiene razón, los herederos de Eusebio Leal, no podemos ser menos. Pero ese peso que se siente en los hombros de todos los comunicadores, no es el de una carga onerosa, sino el de una mano que se apoya, es el de la confianza depositada.