La imagen de Cuba en la cerámica

26 de abril de 2022

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Gabriela Ortiz

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Cuba, Cultura, Emilio Cueto, Eusebio Leal Spengler, Literatura, Museo de la Cerámica, Oficina del Historiador de La Habana, Patrimonio

Fotos: Alexis Rodríguez

 

 

El Museo Nacional de la Cerámica Contemporánea Cubana recibe una vez más, por estos días de la Feria Internacional del Libro de La Habana, las presentaciones literarias del sello editorial Boloña. En esta ocasión con un libro que dialoga de forma directa con este espacio; “¡Inspirada por Cuba! Una visión panorámica de la cerámica de tema cubano” es un texto que hace un recorrido por las creaciones cerámicas dedicadas a Cuba desde el siglo XVIII hasta fechas recientes. Sus autores, Emilio Cueto y Julio Larramendi, acudieron a presentar este necesario libro del catálogo de Ediciones Boloña. Además, presentan Magda Resik, Directora de la editorial, Michael González, Director de Patrimonio Cultural de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana, y Yamilé Moya, la encargada del diseño.

La Directora de Ediciones Boloña, ante una sala concurrida y ansiosa por adquirir el libro, aseveró: “Este es el día de Emilio Cueto”. Con esta afirmación, secundada por los presentadores que acompañaban a ese reconocido coleccionista de arte e investigador cubano, aseguró que el libro es la consolidación de la labor de un hombre apasionado por Cuba. Emilio Cueto ha conseguido tener, gracias a su propia gestión y recursos, una vasta colección de piezas relacionadas de diversos modos con Cuba, que invaden hoy todos los rincones de su casa en Washington D.C. Es un investigador incansable que ha puesto su esfuerzo en la búsqueda de verdaderos tesoros de tema cubano.

 

 

El nombre del Historiador Eusebio Leal Spengler fue enunciado por cada uno de los que intervinieron, pues gracias a su empeño se siguen revelando grandiosos bienes para la cultura cubana. De este modo, Magda Resik expresó que “tener a Emilio Cueto es tener a Cuba y a Leal presentes”, pues ambos son personalidades con una sensibilidad afín, que establecieron entre sí una relación de complicidad y respeto.

El trabajo que durante varios años ha realizado Emilio Cueto es digno de admiración y reconocimiento. Es por este motivo que la presentación dedicó gran parte de su tiempo a resaltar el valor de su obra, para luego hablar del libro que convocó allí al público lector.

 

 

Para ofrecer detalles de este ejemplar del catálogo de Ediciones Boloña tomó la palabra el propio Emilio Cueto, quien compartió con los presentes su conocimiento sobre la historia nacional, en particular esa imagen de Cuba que tomó forma en numerosos y variados objetos de cerámica.

El libro está compuesto de dos partes fundamentales. La primera se dedica a ofrecer una muestra de la presencia de Cuba en piezas fabricadas de cerámica, las cuales el autor fue hallando en su búsqueda por disímiles regiones del mundo. La segunda parte propone piezas que fueron identificadas con la etiqueta Cuba como estrategia de venta, sin embargo no tienen ninguna relación con la isla los grabados o diseños empleados. De esta manera el libro contiene las fotografías de esas piezas junto a los grabados originales cuando el autor podía identificar su origen, en la mayor parte de los casos litografías hechas por Federico Mialhe o por Fernando de la Costa y Laureano Cuevas.

 

 

Se estructura además por temas, y por los fines de los objetos hechos de cerámica: uso oficial, uso doméstico o uso comercial. También se dedican apartados que indagan en las guerras de independencia y las piezas creadas para recaudar fondos. Asimismo, se incluyen secciones relacionados con el tabaco, con el béisbol, con la religiosidad y con los suvenires de la isla de Cuba. Contiene al final un índice de fábricas, artistas y países para que el lector y el investigador puedan navegar de forma más accesible a la información.

Son sin dudas curiosos hallazgos los que se reúnen en las páginas de “¡Inspirada por Cuba! Una visión panorámica de la cerámica de tema cubano”. Es un libro que en esencia demuestra la fuerza de la imagen de Cuba. Como afirmó Michael González, el valor de este material está en que no solamente se presenta un catálogo de las piezas, sino que se logra una valiosa interpretación del patrimonio. Emilio Cueto, junto a las fotografías de Julio Larramendi y un exigente equipo editorial, consigue reconstruir el imaginario que subyace en cada elemento.