En Bayamo, “Acto de fe”: tradición y cubanía

16 de octubre de 2018

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Estrella Díaz

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Bayamo, Cuba, Cultura, Exposición, Fotografía, Tradición

Fotos cortesía del entrevistado

 

 

El próximo 19 de octubre en el hermoso lobby del Teatro Bayamo y a propósito de los festejos por la Fiesta de la Cubanía, quedará inaugurada una exposición fotográfica personal de Alexis Rodríguez, titulada Acto de fe. La muestra contiene 17 imágenes tomadas por el fotorreportero en los años 2010 y 2017, durante la peregrinación a El Rincón, sitio donde está enclavado el santuario que rinde culto a san Lázaro (en la religión cristiana) o Babalú Ayé (en las de origen africano).

 

 

En conversación exclusiva Alexis Rodríguez quiso, en primer lugar, agradecer a los organizadores de los festejos, al Centro Provincial de Arte de Granma y a los directivos de la Asamblea Municipal del Poder Popular de Bayamo la invitación en un momento tan relevante: “porque –subrayó– son 150 años del inicio de nuestras Guerras de Independencia y los 150 de haberse interpretado, por primera vez, el himno nacional por lo que exponer en tierras bayamesas es un gran honor”.

 

 

 

Adelantó que para armar Acto de fe realizó una intensa y exhaustiva búsqueda en sus archivos y “saltó” una serie que había comenzado en el año 2010, pero que “jamás” tuvo el ánimo de exponer: “el 17 de diciembre de 2010 fui a El Rincón con el objetivo de documentar la peregrinación que se realiza cada año al Santuario en evocación de San Lázaro, en el habanero poblado de Santiago de las Vegas. Sentí que ese era el tema que más se ajustaba porque es tradición y cubanía. Al buscar información me percato que el 17 de diciembre de 2017 se cumplieron 100 años de la primera peregrinación y volví sobre mis pasos dados siete años atrás.

 

¿Quién curó la muestra?

La joven Dayana Víctores, excelente especialista; estoy muy contento de la manera que se trabajan las artes visuales en Bayamo, porque lo hacen desde el respeto y profesionalidad.

 

 

Acto de fe es una muestra nada complaciente, ¿cómo hiciste para no despojar la belleza de la imagen y, a la vez, mantener la real crudeza de lo que sucede en esa procesión?

Fue muy difícil. En diez años de trabajo consecutivo, esta es la primera exposición que realizo de corte documental y las imágenes tomadas no han sido publicadas con anterioridad: fue algo que realicé para mí. Hay fotos muy duras, pero incluyo otras que suavizan la muestra. El punto de vista de la exposición tiene dos vertientes: visualizar el que, realmente, acude a la peregrinación porque tiene una profunda fe en ese santo y el que se aprovecha de la fe de otros; en otras palabras, está el especulador que se beneficia con la coyuntura para ganar dinero. Pero, todo planteado desde el respeto porque es un tema delicado.

 

 

Creo que el hecho de tener guardadas las imágenes habla a favor de tu interés por la memoria, pero a la vez evidencia que trabajas en líneas abiertas porque sé que las primeras fotos fueron tomadas en 2010 y el pasado diciembre volviste sobre el tema.

Hay algo muy interesante: al regresar al santuario encuentro cambios, o sea, ya fuente no era un surtidor que emanaba de una piedra, el altar principal se había modificado, el San Lázaro no estaba emplazado donde originalmente se encontraba y fue sustituido por la imagen el San Lázaro de las muletas. Es decir, que el santuario había cambiado. En la muestra ese detalle no se percibe porque no era la intención, pero es algo que subyace.

 

 

¿Por qué el color?

Porque en Acto de fe el morado y el amarillo son los colores protagónicos. Cuando estaba preparando la exposición, llegó a Habana Radio Julio Larramendi, un fotógrafo que respeto mucho, y me comentó que para el 2019 está preparando una serie de exposiciones en su galería, que está en el Hostal Conde de Villanueva en La Habana colonial. Me sugirió ampliar esta serie hasta unas cuarenta obras para coordinar una exposición más grande. Por lo tanto, el próximo 17 de diciembre, volveré a peregrinar hasta El Rincón y, cámara en mano, documentaré el hecho de manera que pueda enriquecer la propuesta. Las dimensiones de la galería, me obliga a ensanchar la serie que tiene muchas posibilidades por la riqueza visual del acontecimiento.

 

 

¿Cómo reinterpretaste el sacrificio que realizan estas personas?, ¿cuál fue tu punto de vista?

Partí de las miradas de las personas que aparecen fotografiadas: esas miradas dicen mucho. A mí me encanta el retrato –y aunque esta serie no es de retratos porque aparece el entorno o el contexto en que se están moviendo los personajes–, sí está con gran fuerza el ser humano y su gestualidad.

 

 

Sé que a fines de noviembre se exhibirá en Camagüey la exposición Urbe sumergida, muestra que se vio en enero de este año en la Casa de México como parte de las festividades por el Aniversario 19 de nuestra emisora, Habana Radio.

Después de casi seis años sin exponer en Camagüey, me hace muy feliz regresar a esa ciudad que tiene una excelente red de galerías y un público muy culto, conocedor y apreciador de las artes visuales. La invitación partió José Rodríguez, el historiador de Camagüey, a quien agradezco inmensamente la posibilidad de, nuevamente, exhibir mi trabajo en la ciudad de los tinajones.

 

 

Sé que ya te preparas para el año que viene…

Haré una exposición a propósito del Aniversario 20 de Habana Radio que, creo, constituirá un alto en mi carrera. Se realizará –como es habitual– en la Casa México, institución de la Oficina del Historiador, que siempre nos acoge con inmensa amabilidad. Será en blanco y negro y centrará el foco en detalles de la Habana a propósito, precisamente, de los 500 años de fundación de la Villa de San Cristóbal de La Habana.

También estoy enfrascada en otro proyecto con ETECSA S.A, que es la compañía de Telecomunicaciones de Cuba. A solicitud de los directivos de esa entidad, la guía de 2019 incluirá varias fotos mías de la ciudad de La Habana, también para festejar su cumpleaños. Entre otras imágenes, contendrá instantáneas de El Capitolio, obra monumental que está en plena restauración, y además, tendrá un texto especialmente redactado por el Historiador de la Ciudad, el Doctor Eusebio Leal Spengler.