Desempolvando la historia capitalina

7 de febrero de 2018

|

Ciro Bianchi, Cuba, Cultura, FILCuba2018, La Habana, Literatura

Por: Indira Hernández/ Fotos: Maria Karla Villar Mora

 

 

Devoto a sus lectores y a la Historia de Cuba, el consagrado periodista Ciro Bianchi Ross regala al público asistente a la 27 edición de la mayor fiesta de la lectura, una compilación de sus populares crónicas dominicales que rescatan el pasado nacional en formato de libro, esta vez reeditado para todas las generaciones.

Bajo el sello de Ediciones Unión, el volumen Memoria oculta de La Habana se suma al homenaje por los 500 años de la fundación de la capital de todos los cubanos, al regresar tras 13 años como una antología de 50 relatos cronicados –los más notables– publicados por el intelectual a partir del 4 de noviembre de 2001 en su habitual columna del periódico Juventud Rebelde.

Durante la presentación del ejemplar en la sala José Antonio Portuondo, Ciro Bianchi contó con maestral oratoria, pasión y una sonrisa en el rostro algunas de sus narraciones a los presentes, a quienes les confesó cómo conjuga el apego a la verdad con la imaginación, además de jugar a veces con la certeza.

En su intervención, se refirió a algunos personajes icónicos de sus historias, cuyas vivencias se han quedado perdidas en el recuerdo. Pero Ciro las trae al presente en su alocución como si las hubiera escrito hace tan solo unos minutos.

“Es un libro que tiene una serie de sucesos y personajes que están en el imaginario del cubano y especialmente del habanero. Tiene un exergo de Dulce María Loynaz que dice ‘un mundo fenecido, el cual pronto ya no quedará ni siquiera en la memoria’”, afirmó.

Además, hizo referencia a uno de sus protagonistas predilectos en sus narraciones y de gran popularidad, Cavelito. “Está también reflejado en las crónicas –añadió Bianchi– Amado Trinidad, el hombre que empezó a pagarles a los artistas y a las personas de la radio los sueldos que verdaderamente deberían cobrar”.

Asimismo rememoró otros personajes como Félix B. Caignet, cuando todavía no se había publicado el libro de Reinaldo González sobre el pionero de la radiodifusión en Cuba. “Félix representa un hombre de una importancia tremenda para la cultura y que creó lo que después hicieron las grandes empresas radionovelísticas. También tengo un trabajo en el ejemplar sobre de dónde surgió la botella, acerca de José Manuel Alemán, ministro de Educación durante el gobierno de Grau, que se enriqueció súbitamente y cuándo le preguntaban cómo robaba tanto dinero respondía ‘¡en maletas!’, y cuento también el suceso de la bomba en el Teatro Nacional puesta por un muchachito vendedor de periódicos, que después llegó a ser un gran pedagogo”, sentenció.

 

 

Este ejemplar, que permite recorrer como un cuento la historia de nuestra Isla, comprende atractivos títulos como “Paseos por La Habana”, “Cómo murió Lezama Lima”, “Chibás se batió nueve veces”, “El muerto Pío Álvarez”, “Cervantes, el olvidado”, “La rusa de Baracoa”, “La mafia te mata”, entre otros.

Igualmente, nos hace disfrutar de trabajos sobre Miguel Alfonso Pozo –conocido por todos por su alias infantil Clavelito–, acerca del reconocido escritor Ernest Hemingway y sus experiencias en Cojímar; la clausura del cabaré Tropicana; así como anécdotas en torno a un peculiar embajador americano de la época de Alfredo Zayas; bombas puestas por anarquistas en La Habana neocolonial, y maletas de dinero robadas y desbordadas que en la huida dejaban a su paso huellas de gran capital.

Según Ciro, estas narraciones nacieron de su hogar, a partir de su contacto con la prensa de la época y de las historias contadas por su padre, las que luego al pasar los años no pudo borrar de su memoria, dedicándose después a reproducirlas en sus escritos desde el rigor de la investigación periodística.

 

 

Con 50 años como periodista y 16 escribiendo para el diario de la juventud cubana, el destacado intelectual y grande de las crónicas continúa fiel a sus seguidores de décadas –y con esta reedición– a quienes no tuvieron la oportunidad en el 2005 de adquirir el ejemplar. Porque él persigue, incansable, el rescate de la historia olvidada, secreta, borrada y la que espera aún por ser contada.

La presentación en la 27 Feria Internacional del Libro de Memoria oculta de La Habana, de la autoría de Ciro Bianchi, constituye una valiosa oportunidad para nuevos y viejos lectores que buscan tanto descubrir como recordar las crónicas que a lo largo de los años han contado con una cálida acogida por parte del público cubano, el cual cada domingo disfruta de su columna en las páginas de Juventud Rebelde.

 

 

Como expresó Leonardo Padura en el prólogo del libro: “se trata de textos con un indudable sabor a crónica de costumbres, en los cuales el periodista hace un ejercicio de rescate de la memoria de una ciudad –y no solo de ella– a través de anécdotas, personajes, historias reales y míticas que marcaron algún momento del pasado del país y que hoy permanecen o permanecían olvidadas o, al menos, relegadas”.

Así, Ciro Bianchi nos invita a un recorrido por un pasado colmado de peripecias y personajes ilustres, en ocasiones por sus virtudes, y en otras por sus defectos. Por ello “nos advierte cómo fuimos para entender mejor cómo somos”.