Andar la arquitectura este verano

20 de agosto de 2019

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Elaine Caballero Sabugueiro

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Centro HIstórico de La Habana, Cuba, Cultura, Oficina del Historiador de La Habana, Patrimonio, Rutas y Andares 2019

 

La calle famosa O’Reilly del Centro Histórico habanero se convirtió, recientemente, en el laboratorio de experiencias donde Rutas y Andares ofreció al público numerosos detalles sobre la historia y la arquitectura del lugar, en especial de las obras remodelas y las que aún se restauran con motivo de los 500 años de La Habana.
En esta ocasión, el Andar la Arquitectura reunió a jóvenes y adultos, quienes bajo la guía de la arquitecta Vanessa Lugo, aprendieron un poco más sobre una de las principales calles de la parte más antigua de la ciudad, la cual debe su nombre a la familia noble llegada de España en siglos anteriores, pero con descendencia irlandesa. Por su relevancia, numerosos académicos afirman que los O’Reilly han pasado a la historia como la gran familia de La Habana.
La primera parada fue en el edificio de estilo barroco que alberga, en su planta baja, la casa matriz de la Agencia de Viajes San Cristóbal, perteneciente a la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana (OHCH). Ubicado en las inmediaciones de la calle O’Reilly y Tacón, el inmueble tendrá una galería de arte entre sus espacios, así como apartamentos destinados a las familias cubanas.

 

 

Las miradas se detuvieron, en un segundo momento, en el Colegio Universitario San Gerónimo, restaurado de forma capital con el mismo propósito de sus inicios: servir como centro de pensamiento a los jóvenes interesados en cursar estudios superiores. En estos momentos se realizan acciones para mejorar el confort de sus oficinas, ya que se producen innecesarios gastos de electricidad al utilizarse, por completo, la ventilación por aire acondicionado y no la natural. Para ello, se pretende cambiar la carpintería y revertir este proceso.
Asimismo, San Gerónimo tiene un Centro de Descontaminación de Documentos Patrimoniales. Como su nombre lo indica, el nuevo espacio depurará aquellos documentos infectados por plagas o algún insecto dañino, mediante una tecnología de punta.

 

EL DUELO CASI OLVIDADO

 

Al caminar por la emblemática calle, el grupo se detuvo unos minutos en el restaurante La Dominica, sitio con cerca de 300 años que siempre ha mantenido su función inicial, precisó la guía.
Muy cerca,en la misma esquina de O’Reilly y San Ignacio ocurrió uno de los duelos más conocidos de La Habana, protagonizado por dos miembros de la Cámara de Representantes, Silverio Sánchez Figueras y Severo Moleón, quien resultó herido en el conflicto. La pelea ocurrió por terrenos en la antigua villa de San Cristóbal.

 

 

En esa intersección peatonal se localiza la Residencia Estudiantil Galbán-Lobo, destinada a estudiantes cubanos y extranjeros, actualmente en remodelación. En su interior habrá aulas, salas de conferencias y otras áreas académicas.
El centro debe su nombre a los comerciantes nacionalizados como cubanos por ser Galbán de origen español y Julio Lobo venezolano. Precisamente este último empresario —explicó la arquitecta— fue una de las personas más adineradas de La Habana antes del triunfo de la Revolución, con sólidos conocimientos sobre la industria azucarera.
Como grandes hombres de negocios, los magnates decidieron unirse y fundar su compañía en O’Reilly y San Ignacio, de las más exitosas en su momento.

 

WALL STREET AL ESTILO HABANERO

 

Los próximos minutos del Andar estuvieron dedicados por completo a conocer la nueva filial de la Fundación Antonio Núñez Jiménez, de la Naturaleza y el Hombre, situada en calle Obispo y Cuba, sitio en remodelación capital.
De acuerdo con la especialista se pretende rescatar la estructura original del inmueble “y será lo más ecológico posible”, aseguró. En su fachada tendrá vegetación, mientras que la carpintería será, en gran medida, a base de bambú y se (re)utilizarán materiales constructivos de otras obras.
A pocos metros y con una belleza arquitectónica monumental, se alza la edificación sede del Ministerio de Finanzas y Precios hasta la década de 1990, además de ser un punto cardinal, como banco, años atrás.
Junto a otros bancos cercanos formaban lo que se conoció como el Wall Street habanero, debido a la morfología de las calles que recuerda la tipología de New York. La obra recibe una importante restauración para convertirse en el Hotel Hacienda.

 

AVES EN O’REILLY

 

Lo que antes figuró como un vertedero de basura, cambio su morfología arquitectónica, así como su destino para acoger, desde el diciembre del 2018, una filial de Asociación Nacional Ornitológica de Cuba (ASOC), gracias al empeño de la OHCH que rescató el espacio, donde se muestran especies autóctonas de Cuba y ejemplares de Latinoamericana.

 

 

Se trata de un sitio cultural y social con el propósito de multiplicar el cuidado de las aves, desde la conciencia, la responsabilidad, el amor a la naturaleza y a la diversidad.
Muy cerca, las artes visuales tienen su asidero garantizado con las salas expositivas de Factoría Habana y la tienda de patrimonio Sargadelos, donde comercializan objetos de cerámicas manufacturados con una calidad admirable.

 

 

Frente, la Casa Víctor Hugo fundada en el año 2005 con la colaboración de la Asociación Francesa Cuba Cooperación, sirve para acercar a los interesados en la obra del célebre escritor francés y profundizar en la cultura del país, que tiene a la ciudad del amor como capital.

 

EL ANDAR SE SUPERA CADA AÑO

 

El paseo culminó en la oficina central del Banco Metropolitano de La Habana, en un inicio Convento de Santa Catalina de Siena, que fue inaugurado por tres monjas del Convento de Santa Clara, quienes construyeron su propio centro de fe.
A partir de la segunda mitad del siglo XIX, comenta la guía,el entorno arquitectónico cambió y las religiosas perdieron intimidad y decidieron vender la propiedad, que pasó a ser un banco, el National Bank of New York, con una visualidad muy diferente al inicial templo religioso.
En uno de los lateralesaparece el Edificio Metropolitana, construido para albergar oficinas y donde el prestigioso fotógrafo Alberto Korda tuvo su estudio antes de trasladarlo hacia el reparto Vedado. O’Reilly ha pasado a la historia como la calle de los fotógrafos. En cuanto al inmueble, la arquitecta explicó que se convertirá en el Hotel Metrópoli.
Más de una hora duró el recorrido que superó las expectativas de los presentes, quienes se marcharon a casa con la satisfacción de crecer desde la memoria y el conocimiento histórico. Cada jueves, a las 10:00 a.m., el Andar la Arquitectura convida a descubrir la belleza de una Habana muy próxima a cumplir sus primeros cinco siglos de vida.