ribbon

Mario Martínez-Casado

16 de febrero de 2018

|

 

Mariomcazado

 

Una vez que terminamos de publicar en esta sección la gran mayoría de las epístolas que figuran en nuestro libro Ernesto Lecuona: cartas, procedemos a incluir en De Ayer y de Siempre muchas de las notas biográficas publicadas al final de la obra.

Ellas tienen como objetivo informar a los lectores quiénes son las personalidades citadas en las cartas.

 

Mario Martínez-Casado Adams (Cienfuegos, 1907-La Habana, 1986). Actor, tenor cómico, director artístico y empresario. Descendiente de la dinastía de grandes artistas cubanos que fundó su tía Luisa Martínez Casado (1860-1926), considerada la más notable actriz criolla del siglo xix.

Hijo de los prestigiosos actores Manuel Martínez Casado y Celia Adams, tuvo experiencias escénicas desde la infancia, al recorrer una extensa área del territorio insular con la compañía de sus padres.

En 1912 su familia se reinstaló en Cienfuegos, donde cursó la enseñanza primaria en el colegio Nuestra Señora de Monserrate e inició el bachillerato. Durante unas vacaciones, Paco Martínez –empresario y administrador del teatro Luisa– recabó su ayuda en tales menesteres. En cumplimiento de esas funciones, partió en 1923 a una gira por la entonces provincia de Santa Clara con la compañía ese pariente suyo. A punto de llegar a Sagua la Grande, solicitó la baja uno de los actores y pidieron a Mario que interpretara sus personajes en las piezas Los campesinos y El santo de Isidra. Desde ese instante, Mario Martínez Casado puso fin a su trabajo administrativo y a los estudios de bachillerato para dedicarse al teatro. En el propio año 1923 debutó como tenor cómico con el citado colectivo en La duquesa del Bal Tabarin. Más tarde fue a La Habana e integró diferentes compañías para presentaciones en ciudades cubanas hasta llegar a la del actor español Jesús Tordesillas, con la cual prosiguió su recorrido por el país mientras asimilaba cuanto veía y estimaba útil en su formación histriónica.

En la capital cubana debutó en 1927 en ocasión de la temporada de arte lírico iniciada ese año por Lecuona en el Regina, en la cual Mario alcanzó mucho éxito. Dos años después retornó a ese teatro a solicitud del maestro y Pepito Gomís para los estrenos de El cafetal y El batey. Seguidamente recibió un contrato procedente de México, gestionado por la tiple María Conesa. Debutó en el Principal, del Distrito Federal, con La corte de faraón. Después pasó a la compañía de Roberto Soto y con ella viajó a distintos estados mexicanos. Además, se presentó en zarzuelas con un colectivo creado por él, y se desempeñó como actor, tenor cómico y director artístico en la temporada de Lecuona en el Iris, en 1934. Participó en filmes mexicanos Santa (1931, Dir.: Antonio Moreno), Juárez y Maximiliano (1933, Dir.: Miguel Contreras Torres), Tiburón (1933) y Tierra, amor y dolor (1934), las dos últimas dirigidas por Ramón Peón.

Cuando en 1937 la actriz Socorrito González –prima suya– inició una temporada en el Principal de la Comedia, Mario volvió a La Habana. Finalizado ese compromiso, fundó una compañía teatral y sentó las bases de una larga etapa de actuaciones en aquel escenario, llevadas a efecto en distintos períodos. Sus diferentes elencos asumieron obras de autores nacionales y europeos, y en 1949 desde allí introdujo en Cuba el vodevil francés moderno, que logró mantener el interés de los espectadores hacia esa modalidad teatral hasta 1957, fecha en que fue demolido el coliseo.

Intervino en la capital cubana en la filmación de la comedia musical Ahora seremos felices (1939, Dir.: William Nolte). Después actuó en las películas Una gitana en La Habana (1950, Dir.: Juan José Martínez Casado) y No me olvides nunca (1956, coproducción cubano-mexicana, Dir.: Juan José Ortega).

A lo largo de su carrera profesional tuvo como constante su amor hacia el arte lírico. Perteneció, en calidad de tenor cómico, a compañías de Augusto Ordóñez, Antonio Palacios, Miguel de Grandy y a la de Aguilá-Martelo. Se destacó asimismo por su labor en la radio y la televisión cubanas, medio este último al que prestó sus servicios como actor y director.

Su esposa fue la actriz mexicana Isabel (Chabela) Mondragón.

Galería de Imágenes

Comentarios