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Los insectos cercopoideos actuales siguen copulando igual que sus antepasados

25 de diciembre de 2015

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Insectos cercopoideos fósiles en cópula

Insectos cercopoideos fósiles en cópula

Los cercopoideos (Cercopoidea) son una superfamilia de insectos hemípteros, algunas de sus especies son consideradas plagas, debido a que afectan a las plantas sobre las que generan el capullo; son, por ello, fitopatógenas. Son insectos muy minúsculos que saltan entre las plantas y así se dispersan. Algunas especies llegan a alcanzar hasta 70cm en saltos verticales, si se compara esta altura con la longitud de su cuerpo, este salto es más impresionante que en el caso de las pulgas, que es un artrópodo saltador por excelencia.

Pero, además de ser magníficos saltadores, los cercopoideos, presentan otras características bien interesantes, por ejemplo, los clastoptéridos poseen una modificación alar con función antidepredatoria, que se caracteriza por formar una proyección semejante a una cabeza al final del cuerpo. La mayoría de los cercopidos pueden segregar hemolinfa desde los tarsos de las patas, es un líquido irritante contra los posibles depredadores; suelen, también poseer pautas de coloración aposemática como medida de evadir a los depredadores. El aposematismo se refiere al uso de señales de advertencia. Entre los animales es frecuente el aposematismo en especies dotadas de medios defensivos potentes, tales como aguijones o colmillos venenosos, o un sabor desagradable; es casi siempre defensivo, buscando ser reconocidos como peligrosos por parte de posibles depredadores.

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Ninfa cubierta de mucílago

También es muy llamativa la fase ninfal de los cercopoideos, durante el proceso de metamorfosis, produce una cubierta de mucílago, semejante en consistencia a la saliva, sobre diversas especies de plantas, algunos van más allá de esta cubierta mucilaginosa, sino que también le dan consistencia mediante sales de carbonato de calcio, hasta formar una estructura tubular. Esta cubierta posee varias utilidades: esconde a la ninfa, defendiéndola de depredadores y parásitos; la aísla de variaciones térmicas bruscas, lo que le facilita una mejor termorregulación; y evita su desecación.

Recientemente, estos interesantes insectos fueron noticia cuando investigadores de la Capital Normal University de China, hallaron el fósil más antiguo de una cópula entre insectos cercopoideos, que data del Jurásico Medio (hace 160 millones de años). En la imagen aparece la afortunada pareja que logró eternizar el momento del éxtasis sexual y que se halló en el noreste del país asiático. El fósil, que se encontróen perfecto estado de conservación, muestra la estática posición de apareamiento vientre a vientre, con el apéndice sexual masculino encajado en la estructura corporal de la hembra. Esta evidencia reveló que la posición de apareamiento de esta especie se ha mantenido inalterada a pesar del transcurso de las eras geológicas. El hallazgo es especialmente valioso ya que se han encontrado muy pocos fósiles de insectos en cópula, además aporta información evolutiva muy significativa.

Recordemos que…

“la Naturaleza inspira, cura, consuela, fortalece y prepara para la virtud al hombre”.

Solo hay un modo de que perdure: respetarla y servirla.

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