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La música en la radio (III)

18 de julio de 2017

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Rosita Fornes en la corte suprema del arte

Rosita Fornes en la corte suprema del arte

 

En el pasado radiofónico, existió un espacio que adquirió mucha popularidad y al paso del tiempo aún se recuerda: “La Corte Suprema del Arte”, cuyo objetivo era descubrir artistas noveles que hasta ese momento eran desconocidos. Pero para hablar de él, veamos cuál fue la razón de su nacimiento.

Debido a la pasión del público por el cine, los teatros tuvieron que cerrar sus puertas para abrirlas, de vez en cuando, con espectáculos de variedades. Sin embargo, surgieron numerosas salas de exhibición cinematográfica, controladas por capital foráneo. Fue entonces cuando la radio jugó un rol importante, pues en los teatros Actualidades y Regina (donde después se construyó el Radio Cine) se empezaron a presentar programas combinados de películas y música. Ernesto Lecuona, por su parte, organizaba conciertos populares, una vez al mes que, alternando en Payret, Nacional y Auditorium, se convirtieron en toda una novedad teatral, al estrenar sus nuevas canciones en voces de excelencia., de las cuales no hablaré, por no ser el objetivo de esta serie de comentarios.

Es importante aclarar que en aquellos momentos, la radio era un medio eminentemente hablado, y fueron dos personas quienes decidieron darle mayor importancia a los programas musicales y de variedades, aprovechando la fama que habían alcanzado muchos de ellos: Ángel Cambó y Miguel Gabriel. Pero tuvieron que enfrentarse a un problema: el alto precio que debían pagar a las pocas figuras líricas existentes.

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Ya se había realizado un intento de programa de aficionados por la emisora CMW, sin resultado trascendente por estar basado en esquemas norteamericanos. Pero el declamador y comentarista radial José Antonio Alonso se popularizó en CMQ con “La Corte Suprema del Arte”, inaugurada el 1ro. de diciembre de 1937 donde, por primera vez, el público decidía quién era el ganador. Alcanzó tremenda audiencia desde sus inicios, y promovió a esas “estrellas nacientes” (así se les denominaba) que, poco a poco compitieron con consagradas del arte lírico., Llegaron a tener tremenda demanda en todo el país, el cual recorrían en compañía de Germán Pinelli, quien las presentaba en su estilo único. De ese espacio radial salieron muchas figuras que se convertirían en artistas de fama internacional, como es el caso de: Rosita Fornés, Armando Bianchi, Alba Marina, Obdulia Breijo, Ramón Veloz, Nilda Espinosa, Xiomara Fernández, dúo Hermanas Romay, Miguel Ángel Ortiz, Hermanas Martí, Merceditas Valdés, Raquel Revuelta, Martha Justiniani, Natalia Herrera, Elena Burque…

La “Corte Suprema del Arte” constituyó un “hito” de la Radio Cubana, pero como dice un refrán que “la avaricia rompe el saco”, cuentan los investigadores como Oscar Luis López, que“cayó en ciertos excesos y hubo, mezclado al triunfo legítimo de algunos buenos aficionados, manejos, explotación, intrigas y ciertas intimidades que motivaron serias críticas”. También la competencia tuvo que ver en esos manejos extra-artísticos, pues en sus inicios el espacio era patrocinado por la firma de cigarros Competidora Gaditana y Miguel Gabriel, quien formaba parte del equipo de realización, en una de las estrategias que caracterizó el sistema comercial de entonces, logró que pasara a manos de su rival: Regalías el Cuño, quien pagó una elevadísima suma de dinero por la compra, lo que representó el primer paso hacia los altos presupuestos de la radio en Cuba.

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