La movilidad en el Centro Histórico La Habana Vieja
16 de diciembre de 2016
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El Centro Histórico La Habana Vieja cuenta con 2, 14 Km2, cuenta con 44 Km de red vial. Estas pueden clasificarse en tres zonas: la de intramuros, con secciones más estrechas, las aceras reducidas; la del borde del Centro Histórico, con calles más amplias; el área aledaña a la Estación Central del Ferrocarril, con secciones variables.
Posee 2,8 kilómetros cerrados al tránsito vehicular, priorizándose en éstos la circulación peatonal en las Plazas (la Plaza de la Catedral, la Plaza de Armas, la Plaza de San Francisco, la Plaza Vieja y la Plaza del Cristo) y en sus accesos, como es el caso de las calles Obispo, Tacón, Oficios, Mercaderes y Teniente Rey. Estas calles y plazas están adoquinadas
Al interior del territorio se mueven vehículos automotores, camiones, bicicletas, bicitaxis y coches de caballo. Cada uno de ellos para el desempeño de distintas funciones y distintos tipos de usuarios.
La incidencia de la actividad económica privada en el entorno ha influido en que los ciudadanos con estos negocios realicen intervenciones ilegales e inconsultas en las aceras, (poniendo lozas) que influye o dificulta en la movilidad de los ciudadanos, fundamentalmente de las personas de la Tercera Edad.
El sistema de transporte público vincula el Centro Histórico con el resto de la ciudad. Este servicio se realiza a través de varias rutas de ómnibus con destino en La Habana Vieja o de paso por la zona, pertenecientes a la Empresa provincial del Transporte. Se vincula además el territorio con la periferia de la ciudad, a través de rutas del sistema “taxis rutero”.
Este territorio tiene la peculiaridad de ofrecer servicio de transporte marítimo en el sentido Habana-Regla, Habana-Casablanca.
La realidad muestra que una parte del territorio se encuentra a distancias superiores a los 350 m de las paradas. Esto genera un recorrido peatonal extenso para los estudiantes de nivel medio y superior que residen en la zona, los residentes que laboran fuera del territorio y para las personas del resto de la ciudad con empleo o necesidades de gestión en instituciones ubicadas en el Centro Histórico. Ello implica graves dificultades para la movilidad en el territorio, lo que conduce a la elaboración de alguna propuesta, por parte de los especialistas, para revertir la situación.
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