ribbon

La lluvia de animales vuelve a ser noticia

27 de febrero de 2015

|

2015-02-19 13-57-45_9  La lluvia de animales vuelve a ser noticia Mayo 14 [Modo de compatibilidad] -7 de mayo de 2014. Los habitantes de una pequeña aldea de Sri Lanka ubicada a orillas del mar han sido testigos de una lluvia de pequeños peces. Todo parece indicar que este fenómeno fue provocado por un fuerte tornado. La mayoría de los peces estaban muertos, si bien en una zona de mayor acumulación de peces, algunos de ellos todavía estaban vivos. No es la primera vez que esto ocurre en Sri Lanka, en 2012 ocurrió una lluvia de gambas en el sur del país

La lluvia de animales es un fenómeno meteorológico que ha ocurrido en muchas regiones del planeta a lo largo de la historia. Este evento, siempre  ha impresionado a la gente y de tal manera, que ha dado lugar a la creación de numerosas leyendas.
A continuación, ofrezco algunos ejemplos de este fenómeno, testimoniados a partir de la llamada Edad Moderna hasta nuestros días. Fueron observados por múltiples personas y publicados gracias a la prensa escrita, lo cual incrementa su confiabilidad.

•    En 1578, grandes ratones amarillos cayeron sobre la ciudad noruega de Bergen.
•    El 11 de julio de 1836, el profesor M. Pontus (Francia) envió una carta a la Academia de Ciencias Francesa comunicándoles acerca de una lluvia de sapos cerca de la ciudad de Toulouse.
•    El 16 de febrero de 1861, la ciudad de Singapur sufrió un temblor de tierra, seguido de tres días de abundantes lluvias. Tras el final de las lluvias, sobrevino una lluvia de peces.
•    El 15 de enero de 1877, en Memphis, Estados Unidos, ocurrió un chubasco de serpientes de unos 45 cm. En el siglo XIX, se registraron  más de quince informes de lluvias de animales en los Estados Unidos.

•    En junio de 1880, se abatió una lluvia de codornices en Valencia.
•    El 7 de septiembre de 1953, millares de ranas cayeron del cielo sobre Leicester, en Massachusetts, Estados Unidos.
•    En 1968, los diarios brasileños registraron una lluvia de carne y sangre, sobre un área relativamente grande.
•    En enero de 1969, en St. Mary’s City, Maryland, Estados Unidos, cayeron canarios muertos.
•    En 1978, llovieron cangrejos en Nueva Gales del Sur, en Australia.
•    En diciembre de 2002, llovieron peces en la aldea de Korona, en las altas montañas, Grecia.
•    En 2007, llovieron arañas pequeñas en Salta, Argentina  y ranas pequeñas en El Rebolledo, Alicante, España.
•    El 1 de agosto de 2008, en Chocó (Colombia) llovió sangre, fue  atribuido a la lluvia de animales. Ese mismo año, llovieron peces y ranas en el Taperal de Benigánim, España.
•    En abril de 2010, en Santo Tomás, Atlántico, Colombia, cayeron cientos de peces.
•    En julio de 2013, luego de una semana de lluvias intensas, en un rancho a las afueras de la ciudad de Chihuahua, México, cayeron alrededor de 40 peces, en un radio de aproximadamente 150 metros.
•    Cada año, entre los meses de mayo y julio, ocurre una lluvia de peces en la Ciudad de Yoro, del departamento homónimo en Honduras. Este fenómeno ha sido observado por más de un siglo.

¿Qué explicaciones científicas se le ha dado a este fenómeno?
El físico francés André-Marie Ampère (Lyon, 20 de enero de 1775 – Marsella, 10 de junio de 1836), matemático y físico inventó el primer telégrafo eléctrico)  intentó explicar las lluvias de sapos con una hipótesis que después fue aceptada y refinada por los científicos. Ante la Sociedad de Ciencias Naturales, Ampère afirmó que en ciertas épocas los sapos y las ranas vagabundean por los campos en grandes números, y que la acción de vientos violentos puede capturarlos y desplazarlos a grandes distancias.
En el caso de la lluvia de peces en Singapur de 1861, el naturalista francés Francis de Laporte de Castelnau (25 de diciembre de 1810 – 4 de febrero de 1880) explicó que el chubasco tuvo lugar durante una migración de peces-gato, y que estos animales son capaces de arrastrarse sobre la tierra, para ir de un charco a otro; como las anguilas, que pueden recorrer varios kilómetros en los prados húmedos, o los lucios que van a reproducirse en los campos inundados. Además, explicó que el hecho de haber visto los peces en el suelo inmediatamente después de la lluvia no es más que una coincidencia, ya que normalmente estos animales se desplazan sobre el suelo húmedo de rocío, o después de un chubasco o una inundación.
Más recientemente, apareció otra explicación científica del fenómeno, que involucra a las trombas marinas. Los vientos que se arremolinan debajo del meteoro son capaces de capturar objetos y animales, gracias a una combinación de la depresión en la tromba, y de la fuerza ejercida por los vientos dirigidos hacia ésta. En consecuencia, estas trombas, o incluso tornados, transportarían a los animales a alturas relativamente grandes, recorriendo además grandes distancias. Los vientos son capaces de recoger a los animales presentes en una superficie relativamente extensa, y luego los dejan caer, en masa y de manera concentrada, sobre puntos localizados. Más específicamente, algunos tornados y trombas podrían secar completamente una charca, para dejar caer más lejos el agua y la fauna contenida en ésta, en forma de lluvia de animales.
Esta hipótesis se ha visto reafirmada por la naturaleza de los animales de estas lluvias: pequeños y ligeros, generalmente surgidos del medio acuático, como anfibios y peces y también por el hecho de que, con frecuencia, la lluvia de animales está precedida por una tormenta.
Sin embargo, hay algunos detalles que no han podido ser explicados. Por ejemplo, que muchos animales sigan vivos aún después de la caída, y algunos de ellos en perfecto estado. Que normalmente, cada lluvia de animales se manifiesta con una sola especie, casi nunca mezclándolas ni incluyendo algas u otras plantas, ¿es un mecanismo seleccionador??
Esto se ha tratado de explicar en el caso de los pájaros, por ejemplo, si la tromba atraviesa una parvada en pleno vuelo, especialmente en épocas de migraciones, es inevitable una lluvia de ellos posteriormente.

La documentación más completa sobre las lluvias de animales, se debe al periodista estadounidense Charles Hoy Fort, (6 de agosto de 1874 – 3 de mayo de 1932) quien consagró su vida a los fenómenos inexplicados por la ciencia de su época. La Biblioteca Pública de Nueva York conserva más de sesenta mil fichas redactadas por Fort, de las cuales gran parte se refiere a casos de lluvia de animales. La Sociedad Forteana, creada en su honor, continúa la búsqueda de fenómenos extraños e inexplicados.

La “lluvia de peces” en la ciudad de Yoro, Honduras, que se repite  cada año, constituye para todos los pobladores de esta localidad un hecho fantástico y casi increíble. Hasta la fecha, nadie ha logrado ofrecer una explicación que logre satisfacer las necesidades científicas de mucha de estas personas. Para muchos, simplemente, constituye un acto mágico, casi milagroso.

El hecho es, que este fenómeno se ajusta casi a la perfección con el paisaje del realismo mágico tan propio de nuestra América Latina.

Recordemos que…”la Naturaleza inspira, cura, consuela, fortalece y prepara para la virtud al hombre”. Sólo hay un modo de que perdure: respetarla y servirla

Galería de Imágenes

Comentarios