ribbon

José Martí y el valor que le atribuyó al amor

14 de febrero de 2020

|

 

Cultivo una rosa blanca, 1976 Cosme Proenza Cultivo una rosa blanca, 1976 Acrílico sobre tela 167 x 66 cm

Cultivo una rosa blanca, 1976, Cosme Proenza, Acrílico sobre tela, 167 x 66 cm

 

En su vasta obra poética José Martí, al igual que lo hizo en cartas y en otros trabajos, destacó la significación del amor.

En un poema titulado Crin hirsuta enfatizó que el amor es la excusa de la vida.

En 1877 en el folleto titulado Guatemala él llegó a asegurar: “Cuando nací, la naturaleza me dijo: ¡ama! Y mi corazón dijo: ¡agradece!”

José Martí precisó así en la introducción del folleto citado, que se editó al año siguiente en  México, lo  que resultó ser un principio trascendental en su existencia: la interrelación del amor con el agradecimiento.

También para él no siempre constituía amor la mera atracción física que podía condicionar el inicio de una relación entre un hombre y una mujer.

En una de sus cartas, fechada en 1882, le señalaría a una de sus hermanas lo siguiente: “Toda la felicidad de la vida, Amelia, está en no confundir el ansia de amor que se siente a tus años con ese amor soberano, hondo y dominador que no florece en el alma sino después del largo examen, detenidísimo conocimiento, y fiel y prolongada compañía de la criatura en quien el amor ha de ponerse.”

Y añadió  en la reflexión que le hizo a su querida hermana Amelia: “Hay en nuestra tierra una desastrosa costumbre de confundir la simpatía amorosa con el cariño decisivo e incambiable que lleva a un matrimonio que no se rompe, ni en las tierras donde esto se puede, sino rompiendo el corazón de los amantes desunidos.”

Hombre de gran sensibilidad Martí actuó motivado por el amor y su vida tuvo una correspondencia plena con lo que fuera plasmando a través de sus escritos y discursos en relación con este tema.

Por ejemplo el 29 de abril de 1893 en el periódico Patria, expresó al respecto:

“La única verdad de esta vida, y la única fuerza es el amor. En él está la salvación y en él está el mando. El patriotismo no es más que el amor. La amistad no es más que el amor.”
Dos años después en una emotiva carta que le enviase a María Mantilla, fechada el 9 de abril de 1895, también manifestó al referirse al amor: “Amor es delicadeza, esperanza fina, merecimiento, respeto.”

En sus poemas igualmente expuso consideraciones en torno al amor.

Ejemplo elocuente de ello es el poema que titulara “Sin amores” reflejado en la Revista Universal de México el 14 de marzo de 1875, en el que expresó:

  Amor, ¡es más que amar!

 ¡Aún se ama, luego

 que se ha apagado

 de la vida el fuego!

Poco tiempo después,  exactamente en la propia Revista Universal, en su edición correspondiente al 27 de junio de 1875, en otra de sus obras poéticas titulada Flor Blanca,  resaltó la trascendencia y existencia del amor tanto en los jóvenes como en las personas de mayor edad.

Para Martí resultaba lógico que el amor en su sentido más general e integral pudiera estar presente en las diferentes etapas de la vida de los hombres y mujeres.

Y en dicho poema afirmó:

Que viví sin amor fuera mentira

Todo espíritu vive enamorado:

El alma joven nuevo amor suspira

Aman los viejos por haber amado.

El alcance que para  Martí tuvo la existencia y desarrollo de este universal y relevante sentimiento puede apreciarse en otra de sus creaciones poéticas en la que en forma metafórica hizo alusión a como el amor era capaz de transformar la muerte en vida al describir una imaginaria escena acaecida en un cementerio.

Él puntualizó:

Es fama que a un cementerio

llegó un señor cierto día

afirmando que no había

tras la tumba, misterio

un ser blanco, vago y serio,

a la tumba se acercó:

“Amor, amor, pronunció

con triste voz quejumbrosa,

y al punto alzóse la losa.

Y el muerto resucitó.

Puede decirse que Martí como hombre de gran sensibilidad actuó motivado por el amor y su vida tuvo una correspondencia plena con lo que fuera plasmando a través de sus trabajos, cartas, discursos, poemas y otras obras.

Él resaltó en un trabajo titulado “Albertini y Cervantes”, reflejado en el periódico Patria, en la edición del 21 de mayo de 1892: “El que ama es oro. El que ama poco, con trabajo, a regañadientes, contra su propia voluntad, o no ama- no es oro.” Y añadió: “Que el amor sea la moda.”

También en Patria, en la sección En Casa, publicada el 2 de julio de 1892, precisó: “¡Con el amor renace la esperanza!”

Galería de Imágenes

Comentarios