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Intervalos de administración de los medicamentos por la vía oral

4 de julio de 2014

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Con frecuencia cuando se emplea la vía oral, se hacen coincidir los horarios de administración de los medicamentos con el horario de las comidas del paciente. Sin embargo, es preciso tener en cuenta que no es lo mismo administrar un medicamento cada 8 horas, que tres veces al día y son las características de cada medicamento las que determinan las pautas de administración.
Hay medicamentos que se deben administrar a intervalos regulares. Por ejemplo, los antibióticos precisan que se mantengan valores por encima de las concentraciones mínimas terapéuticas; los antiarrítmicos deben ejercer su acción de forma sostenida y otros fármacos como el dipiridamol, la bromocriptina y el clonazepam, deben seguir una administración regular ya que su acción depende directamente de la concentración sanguínea.
Con los medicamentos de estrecho margen terapéutico, en los que la dosis terapéutica y la dosis tóxica se encuentran muy próximas entre sí, se deben monitorear las concentraciones plasmáticas como en el caso de la teofilina, la aminofilina o el fenobarbital. También es aconsejable mantener intervalos de administración constantes para que no se produzcan fluctuaciones que conlleven a concentraciones infraterapéuticas o picos plasmáticos tóxicos.
En otros casos, como el de los analgésicos, hay que valorar la situación individualizada del paciente para establecer la pauta de administración más correcta, ya que el control del dolor crónico requiere la administración a intervalos regulares, pero en ciertos casos resulta preferible administrar dosis más altas antes de dormir y respetar el sueño del paciente.

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