ribbon

Guaguancó Matancero / Muñequitos de Matanzas (II)

23 de febrero de 2021

|

 

Vocalistas del “Guaguancó Matancero”: Esteban Lantri “Saldiguera,” Hortensio Alfonso “Virulilla,” Juan Mesa “Juan Bosco”

Vocalistas del “Guaguancó Matancero”: Esteban Lantri “Saldiguera,” Hortensio Alfonso “Virulilla,” Juan Mesa “Juan Bosco”

 

La primera versión de Guaguancó Matancero, estaba conformada por Florencio Calle (director y catá), en dúo inolvidable de voces: Esteban Lantrí “Saldiguera” y Hortensio Alfonso “Virulilla”; y en la percusión Esteban Vega “Chachá”, Ángel Pellado, Ernesto Torriente, Juan Meza y Gregorio Díaz “Goyito”, plasmando su huella en cada rumba entonada; y por suerte por un largo espacio de años y hasta la actualidad,  en un rico testimonio discográfico.

Se dice que la fama de esta agrupación trascendió vertiginosamente,  las márgenes del matancero río San Juan, dejaba escuchar una sonoridad inimaginada, entonces practicada en los más importantes barrios matanceros.

Cuentan que, un día llegó al barrio de La Marina alguien buscando al Guaguancó Matancero para llevarlos a La Habana, contratados por la Sociedad Unión de Matanzas para participar en las famosas fiestas que se daban en La Habana, entre otras “Matanzas en La Habana” que se daban en los salones bailables de la Tropical y La Polar.

Es entonces que, estos muchachos llaman la atención de los gerentes del sello discográfico Puchito, para grabar un sencillo en 78 rpm que contenía, por cada cara, los temas “Los muñequitos”, de Esteban Lantrí, y “Los beodos”, de Lorenzo Martínez, amparados por el número de catálogo 298. Este soporte de inmediato fue incluido en los despachos destinados a las victrolas localizadas en bares, bodegas y cantinas.

Fue tal la aceptación por parte del pueblo de estos temas, en especial “Los muñequitos” –texto donde se hablaba de los personajes aparecidos en los comics de los periódicos habaneros. El éxito de esta grabación movió a la gerencia del discográfico a llamar nuevamente al Guaguancó Matancero a otros programas de grabaciones. Esto motivó a que el pueblo trocara el nombre de Guaguancó Matancero por el de “Muñequitos de Matanzas” convirtiéndose el tema de la noche a la mañana en un clásico de la música popular cubana. La difusión de estas primeras grabaciones realizadas al Guaguancó Matancero cambia el curso en la vida de estos jóvenes rumberos –entonces instalados en la capital cubana– al solicitar la disquera Puchito el registro de ocho grabaciones más entre 1956 y 1957.

Galería de Imágenes

Comentarios