Fructífero trabajo conjunto de investigadores españoles y cubanos
6 de marzo de 2015
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Científicos españoles conjuntamente con un cubano descubren once nuevas especies de moluscos en al archipiélago canario.
El grupo hispano-cubano está integrado por investigadores de la Universidad de Oviedo, del Museo de Ciencias Naturales de Tenerife, el Servicio de Biodiversidad del Gobierno de Canarias, y el Instituto de Oceanología de La Habana, Cuba.
Este grupo ha descrito once especies nuevas de moluscos marinos en Canarias, entre las que destaca por su excepcionalidad Notodiaphana atlantica, la primera y única especie de este género en aguas del Atlántico. La familia Notodiaphanidae sólo disponía de un ejemplar en el Indo-Pacífico, Notodiaphana fragilis.
Sin embargo, los muestreos regulares realizados por este grupo de investigadores en el mar Caribe y en las islas Canarias han aportado, en distintas fechas y lugares, ejemplares vivos de N. atlantica. Este molusco marino, tiene un característico punto rojo en el cuerpo, visible a través de la concha. Desde octubre de 2012, los científicos vienen trabajando en estas zonas y recogieron varios ejemplares entre las algas a unos dos metros de profundidad, en aguas cercanas a Arrecife, al este de la isla de Lanzarote.
Son muy interesantes el resto de las especies descritas porque carecen de larvas planctónicas, lo que les confiere una capacidad de dispersión muy limitada. Esta característica de su biología reproductiva conduce a la aparición de endemismos locales. Estas características avalan la potencialidad de estas especies de moluscos como bioindicadoras del estado de los ecosistemas marinos que han sufrido algún tipo de alteración.
En la Marina de Arrecife, se descubrieron: Volvarina arrecifensis y Volvarina saramagoi, que fueron bautizadas con esos nombres, la primera señalando el lugar donde fue descubierta y la segunda, en honor de José Saramago, escritor y poeta portugués, Premio Nobel de Literatura, que eligió a Lanzarote “como refugio y residencia en la recta final de su vida”. Estos descubrimientos ponen en evidencia la importancia de este enclave de la isla de Lanzarote para la biodiversidad marina.
Utilizando escafandra autónoma y revisando los descartes de las nasas de pesca, los científicos hallaron también, entre otros, ejemplares de las especies Volvarina juanitae y Prunum javii, además de en Lanzarote, en Fuerteventura, Tenerife y Gran Canaria.
Fue también descrita la diminuta babosa marina Runcina akaimui de la costa de La Restinga, una zona impactada por el volcán submarino de la isla El Hierro, que entró en erupción en 2011. De manera que la evaluación actual de la población de esta babosa puede aportar información relevante acerca del área afectada. Este pequeño molusco ha sido nombrado en homenaje a la asociación Volcanes de Canarias, por la encomiable labor divulgativa ejercida desde el principio de la crisis volcanológica de la isla de El Hierro como consecuencia del volcán submarino que recibió el nombre de Akaymu, y que comenzó su actividad frente al litoral de La Restinga,
esta es una interesante localidad y pedanía española perteneciente al municipio de El Pinar de El Hierro, está situada en el extremo sur de la isla, en plena costa atlántica. La Restinga constituye el núcleo de población más meridional de toda España y de Europa política. También se encontró la especie Runcina alnordoi
Con este descubrimiento se elevan a 63 las especies nuevas, 10 caracoles y 53 babosas, que han sido descritas por el equipo en Canarias, por lo han proyectado para el próximo año realizar un catálogo ilustrado y una exposición itinerante por el archipiélago canario con fines divulgativos.
Recordemos que…”la Naturaleza inspira, cura, consuela, fortalece y prepara para la virtud al hombre”. Sólo hay un modo de que perdure: respetarla y servirla
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