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Artur Lundkvist

9 de diciembre de 2016

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Artur Lundkvist visitó Cuba en 1963, lo cual dejó huella en su vida y su escritura. Mas no solo Cuba le interesó. Lundkvist fue un “descubridor” que abrió a sus conciudadanos –era sueco– las literaturas de América Latina, aunque también se movió por España (donde residió ocasionalmente), por África, por Asia y por varias latitudes más del Tercer Mundo del siglo XX.

Fue amplio el diapasón creativo del escritor y poeta sueco, además de ser traductor. Gracias a él, en buena medida fueron conocidos al lector escandinavo autores como Alejo Carpentier, José Lezama Lima, Nicolás Guillén, César Vallejo, Vicente Huidobro, Jorge Amado, Miguel Ángel Asturias, Pablo Neruda, Jorge Luis Borges, Julio Cortázar, Carlos Fuentes, Octavio Paz, Mario Vargas Llosa, Gabriel García Márquez, Ernesto Sábato y Drummond de Andrade, entre otros.

Miembro de la Academia Sueca desde 1968 y asesor para asuntos literarios de la Comisión de los Premios Nobel, por las influyentes manos de Lundkvist pasaron las obras de varios de los autores más destacados de habla española.

De talla gigantesca, a imagen de un clásico vikingo, durante su estancia en La Habana Artur Lundkvist se alojó en el hotel Riviera, junto a su esposa, la también poetisa Maria Wine. De sus opiniones al cabo de dialogar con las gentes y analizar los cambios socioeconómicos y políticos del país, entresacamos estas palabras:

“Cuba se ha convertido en un foco internacional cuya importancia no puede igualar ningún otro país pequeño. Cuba saca fuerza y tenacidad del hecho de sentirse en el nudo mismo de la evolución contemporánea, como pionera de vanguardia. Esta convicción ha penetrado sutilmente en Cuba, dando a todo un amplio contenido, un significado nuevo y estimulante, que no es fácil de encontrar en ninguna otra parte del mundo”.

De su producción citemos los siguientes libros: Brasas (1928), Vida desnuda (1929), Ciudad negra (1930), Hombre blanco (1932), Puentes de la noche (1936), Sangre de dragón (1936), Canto de sirena (1937), Encrucijada (1942), Poemas entre el animal y Dios (1944), Piel sobre la piedra (1947), Huellas en el agua (1949), Vida como hierba (1954), Rosa de los vientos (1955) y Continente volcánico (1957), entre poesía y prosa, y sin agotar el listado.

Lundkvist nació el 3 de marzo de 1906 y murió en Estocolmo a los 85 años, el 11 de diciembre de 1991. Dentro de la cultura de su país, es personalidad recordada por sus notables aportes al mejor conocimiento de los pueblos, sus culturas e idiosincrasias.

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