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Antechinus de cola negra y el exceso de sexo

8 de agosto de 2014

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A veces el sexo puede matar. Es el caso de una nueva especie de marsupial que, hace muy poco, acaba de ser descubierta en Australia. La muerte, es el único destino posible para los machos de esta especie.

Zoólogos del Instituto Tecnológico de Queensland, Australia, anunciaron el descubrimiento de una nueva especie de ratones marsupiales dentones que mueren por agotamiento sexual, se trata de la especie Antechinus arktos.

Antechinus es un género de marsupiales de la familia Dasyuridae, conocidos vulgarmente como  ratones marsupiales dentones. El género consta de 13 especies propias de Australia y Tasmania.
Son animales extremadamente voraces, con un metabolismo muy activo que requiere la ingesta diaria de hasta el 60% de su peso. Se alimentan principalmente de artrópodos, entre estos, escarabajos, arañas, cucarachas, langostas y saltamontes. Otros invertebrados como lombrices de tierra. También pequeños vertebrados a los que cazan ferozmente para devorarlos a gran velocidad, por ejemplo, pequeñas aves, ratones y reptiles. No desdeñan el alimento vegetal, incluido el polen.

En relación con la nueva especie, los científicos detallaron que fue descubierta en el pico más alto de los bosques de Gondwana, en el Parque Nacional de Springbrook, Australia. Es más grande que la mayoría de sus parientes biológicos y tiene círculos de color naranja y amarillo alrededor de los ojos y las patas y la cola, esta última de color negro.

Según los autores del trabajo, el apareamiento de este marsupial se prolonga durante unas pocas semanas al año, pero resulta tan extenuante y se incrementan tanto los niveles de la hormona del estrés, que se cobra la vida de la mayor parte de los machos, dejando estériles a los supervivientes. El acto sexual de este animal, que no requiere de cortejo previo, consiste en una bacanal de 14 horas de duración en la que el macho copula intensamente con el mayor número de hembras posibles, con el fin de aumentar las posibilidades de engendrar. Debido a esto, el macho, muere antes del año de vida.  Las hembras, sin embargo, tienen la capacidad de bloquear la producción de dicha hormona, aunque también acaban por morir tras el destete de su primera camada.

El equipo de científicos había encontrado previamente dos nuevas especies del género Antechinus en la misma zona, lo que resulta sorprendente dado el escaso número de especies nuevas de mamíferos que se documentan al año.

Los investigadores aún desconocen el número de ejemplares de la nueva especie, pero en vista del número de bajas que se producen al final de la época de celo, abogan ya por la inclusión de Antechinus de cola negra en la lista de especies protegidas en peligro de extinción

Curiosidades. El sexo mejora nuestra salud pero también nos puede matar. ¿Morir mientras se hace  el amor? ¿Sabía usted que muchos personajes de la historia murieron en el momento más álgido de la práctica sexual? Aquí les dejo algunos ejemplos:

Atila, rey de los hunos. Acababa de llegar a un acuerdo con el Papa León I y planeaba su mayor conquista: Roma. En el año 453, se casó con su duodécima esposa, Ilico, una bella y joven muchacha germana. El esfuerzo de la noche de bodas acabó con él, y apareció muerto a causa de una hemorragia nasal.

Papa León VII. Antes de llegar a Sumo Pontífice llevaba una sencilla vida como monje benedictino, pero pereció el 13 de julio de 939 de un infarto mientras mantenía relaciones sexuales.

Félix Faure. Fue nombrado presidente de la República Francesa en 1895, pero su mandato fue interrumpido repentinamente por causa de una apoplejía el 16 de febrero de 1899, en una coyuntura salpicada por la relación mantenida durante su mandato con una prostituta. Se dice que murió mientras practicaban el sexo oral.

Nelson Rockefeller.  Multimillonario y político estadounidense, fue vicepresidente de los Estados Unidos entre 1974-1977. Retirado ya de la política, murió el 26 de enero de 1979 de un ataque al corazón. Oficialmente se informó que había fallecido mientras trabajaba en su oficina de Manhattan. Pero pronto se averiguó que su muerte se había producido en su casa de Maine, mientras practicaba el acto sexual con su secretaria.

Recordemos que…”la Naturaleza inspira, cura, consuela, fortalece y prepara para la virtud al hombre”. Sólo hay un modo de que perdure: respetarla y servirla

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