ribbon

Animales emblemáticos: el lince ibérico

28 de mayo de 2021

|

 

Lince ibérico atropellado

Lince ibérico atropellado

 

El año pasado (2020) murieron atropellados un gran número de linces ibéricos, felino muy amenazado y que aparece en la Lista Roja de la UINC catalogado como en peligro Crítico de Extinción.

Una de las posibles explicaciones para estas trágicas muertes parece ser que al haber menos tráfico durante el confinamiento por causa de la pandemia de COVID-19, los linces se “confiaron” a cruzar las carreteras y los coches que circulaban lo hacían a mayor velocidad. Una combinación que ha resultado letal para la especie. Se confirmó que durante el confinamiento, en tan solo siete días murieron 3 linces atropellados en carreteras del entorno de Doñana.

Doñana es un espacio natural protegido español situado en Andalucía que cuenta con 104.970 ha (50.720 ha en el Parque Nacional, y 54.250 ha en el Parque Natural). Comprende tanto el Parque Nacional de Doñana (creado en 1969) como al Parque Natural de Doñana (también llamado Parque Natural del Entorno de Doñana o pre-parque, creado en 1989, y ampliado en 1997), y su gran extensión de marismas acoge durante el invierno a numerosas especies de aves acuáticas, que suelen alcanzar cada año los 200.000 individuos.

El lince Ibérico (Lynx pardinus) es el felino más amenazado del planeta. Restringido a la Península Ibérica, la drástica disminución de ejemplares ha llevado a que sea declarada especie protegida (1966) y a que solo existan colonias de linces en los Parques Naturales de Sierra de Ándujar y Cardeña, Montoro, y a Doñana y su entorno pues las otras colonias peninsulares se estiman desaparecidas. En Portugal se hacen esfuerzos para la recuperación de su hábitat como ocurre con la Reserva Natural de la Sierra de Malcata.

Desde 2011 han muerto 149 linces atropellados en 54 carreteras de Andalucía. En 2013 se calculaba que solo quedaban dos poblaciones en Andalucía aisladas entre sí con un total de algo más de trescientos individuos en aumento, ​ más otra en los Montes de Toledo de unos quince individuos y por ello escasamente viable, lo que lo convierte en la especie de felinos más amenazada del mundo.

En el año 2018 se estimó una población de seiscientos ochenta y seis ejemplares en libertad distribuidos principalmente por Andalucía (en parque nacional y Natural de Doñana, en Sierra de Andújar, Parque natural de la Sierra de Cardeña y Montoro en Córdoba y Sierra de Cazorla), en Castilla-La Mancha (en los Montes de Toledo), Extremadura y Portugal (Parque natural del Valle del Guadiana).

 

Lagunas del El Acebuche

Lagunas del El Acebuche

 

El Centro de Cría de El Acebuche en Doñana desarrolla un programa de cría en cautividad en el que ha logrado la supervivencia de once ejemplares nacidos en el centro más una treintena capturados en el parque y cuya posible supervivencia era más que dudosa. Estos intentos de conservación se ven amenazados por la alta tasa de mortalidad de ejemplares o los recurrentes atropellos a causa de vehículos que entran ilegalmente en el parque o transitan por las carreteras del entorno de Doñana, aunque a veces las causas de deceso no quedan lo suficientemente claras como denuncian algunos organismos. La delicada situación de esta especie animal la ha convertido en uno de los símbolos más reconocibles del parque.

Tema. 229. Lince ibérico joven.

Lince ibérico joven

Para inicios del año 2020, de acuerdo con la ONG WWF (del inglés World Wild Fund for Nature; en español, Fondo Mundial para la Naturaleza), organización conservacionista independiente internacional, se había logrado aumentar la población hasta los 700 ejemplares y evitar así su desaparición. Según esta organización, para garantizar la salvación del lince ibérico, se necesita que existan en libertad 750 hembras reproductoras (ahora solo hay 160) y al menos ocho nuevas poblaciones en territorios aún no ocupados; y, por supuesto, debemos seguir luchando para que no muera ni un lince más atropellado.
Otras amenazas. Si bien ha sido un gran éxito de conservación la lucha por salvarlo, la especie aún enfrenta graves amenazas: la falta de conejos (su alimento favorito), el furtivismo (lazos, venenos y disparos de escopetas que han matado a 37 linces en los últimos años), la alteración y pérdida de sus hábitats naturales, la fragmentación y el aislamiento de sus poblaciones.

Todavía queda mucho por hacer para alejarla definitivamente del riesgo de extinción.

El caso del lince demuestra que es posible salvar a una especie de la extinción con grandes esfuerzos sobre el terreno. Por lo tanto, después de tanta energía desplegada, no se puede dar ni un paso atrás, ahora más que nunca hay que salvar al lince ibérico.

 

Recordemos que… “la Naturaleza inspira, cura, consuela, fortalece y prepara para la virtud al hombre”. Sólo hay un modo de que ella perdure: respetarla y servirla.

Galería de Imágenes

Comentarios