El Paramilitarismo en Estados Unidos
31 de julio de 2020
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Todo indica que el paramilitarismo ha llegado a Estados Unidos. Quienes lo hicieron surgir y lo patrocinaron en Colombia, Centroamérica, Argentina y otros “oscuros rincones del mundo” han decidido finalmente utilizar esos procedimientos dentro de los límites del propio país imperial, a donde algunos ingenuos pensaban jamás llegarían tales prácticas, que los gobiernos estadounidenses reservaban para aplicar en el denominado “mundo subdesarrollado” dependiente de sus dictados.
Evidentemente, el régimen de Trump ha llegado a la conclusión de que el paramilitarismo le es imprescindible -en estas difíciles circunstancias para su reelección-, y lo lanza de manera organizada y armada contra las protestas populares que no cesan en ciudades norteamericanas y le sirven a su vez para proyectar una imagen de anarquía, ingobernabilidad y caos en medio de la cual el grotesco mandatario yanqui pretende erigirse como “el hombre de la ley y el orden”, capaz de garantizar la estabilidad económica y desviar la atención que hoy concentran la pandemia COVID19 y la brutalidad policial; ellas son el verdadero caos causante de la profunda crisis multilateral que hoy une al decadente imperio de otrora.
En este caso, el llamado Departamento de Seguridad Interna ha sido el encargado de organizar y armar a los supuestos “agentes federales” enviados a las ciudades rebeldes en funciones de represión y crimen. Hasta el momento, las fuerzas armadas parecen mantenerse al margen de estos desmanes, considerando que nada tienen que ver con sus misiones constitucionales.
Por otra parte, es curioso que ninguno de los grandes medios de comunicación del país imperial haya realizado una investigación periodística seria y detallada acerca de los “agentes federales”, verdaderos grupos paramilitares y bandas armadas que pudieran ser utilizadas por Trump para forzar los resultados electorales de noviembre próximo, los cuales no aceptará si le son adversos, según el propio mandatario ha declarado.
Los más veteranos y los más pesimistas dicen recordar a la Alemania del 33, en el siglo pasado, cuando las bandas armadas del partido nazi asolaban aquel país bajo similares argumentos de “ley y orden”, preparando a la base social sobre la cual se erigiría el Tercer Reich, de triste recordación para el mundo, incluido el pueblo estadounidense.
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