ribbon

Emisión conmemorativa del aniversario 50 de la federación filatélica cubana

22 de abril de 2016

|

 

Sin título-1 (Small)

 

Correos de Cuba puso en circulación esta interesante emisión que contiene las siete Maravillas de la Filatelia Cubana.
El sello de diez centavos muestra una cubierta circulada por los correos marítimos, mientras que el timbre de treinta centavos presenta un sobre franqueado con sellos del Correo Local de La Habana, creado en 1855, las primeras estampillas habilitadas del mundo.
Un sobre franqueado con el sello con la sobrecarga Experimento del Cohete Postal de 1939, primera estampilla de la temática de Cosmos fue escogido para el valor de ochenta y cinco centavos.
En el timbre de veinte centavos vemos las primeras estampillas que circularon en Cuba, impresas en España en 1855 también para Puerto Rico y Filipinas con la efigie de la reina Isabel II de España.

 

Sin título-2 (Small)
No podían faltar los sellos del Correo de la República de Cuba en Armas, primeras estampillas cubanas de 1874 durante la primera contienda por nuestra independencia en el valor de sesenta y cinco centavos.
Continuamos con los Habilitados de Puerto Príncipe en el sello de 75 centavos.
Por último, en la hoja souvenir, con el valor de un peso, se muestra la marca postal Havano la más antigua de estas señales conocidas en Cuba hasta ahora.
En los sellos aparecen motivos vinculados a estas siete Maravillas de la Filatelia Cubana como un barco de navegación a vapor, un segmento de la Muralla de La Habana, el Cohete Postal Cubano, una caballería mambisa y la estatua de la India en La Habana, entre otros.

 

Sin título-3 (Medium)
La impresión se realizó en papel cromo por el sistema OFF-SET en formato vertical con las medidas 31 por 48 milímetros excepto el valor de treinta centavos en formato horizontal con las medidas 48 por 31 milímetros, todos con perforación 12 y medio.

 

Sello cubano con un falso retrato de Cristóbal Colón

Al morir Cristóbal Colón en Valladolid el 20 de mayo de 1508 dejó dispuesto en su testamento que su cadáver fuera sepultado en la ciudad de Santo Domingo, la capital de La Española, su isla preferida.
Sin embargo, este deseo suyo no se cumplió de inmediato reposando sus restos durante veinte años en monasterios españoles hasta que al fin en la primavera de 1526 fueron trasladados a la caribeña isla de La Española junto con los de su hijo Diego fallecido el propia año para ser sepultados en el presbiterio de la catedral dominicana.
Allí descansó el cuerpo del Descubridor de América hasta que en 1795 fue trasladado a Cuba, el 9 de enero de 1796, por haber cedido España a Francia toda la parte hispánica de la isla La Española por el Tratado de Basilea.
Al llegar los restos de Colón a la mayor de las Antillas fueron depositados en la Catedral de La Habana el 19 de enero de 1796 donde permanecieron hasta septiembre del propio año cuando fueron llevados a Sevilla.
El propio 9 de enero de 1796 cuando llegaron a Cuba los supuestos restos de Colón, pues nunca se supo si eran los del gran navegante o los de su hijo Diego, se efectuó una reunión del Cabildo de La Habana.
En el cónclave se adoptó el acuerdo de confeccionar una réplica de su retablo para colocarlo en la antesala Capitular. Por este motivo el Ayuntamiento habanero solicitó al Duque de Veragua, séptimo nieto y sucesor en propiedad del Gran Almirante, la donación de un retrato de su antepasado para ser exhibido en la Casa de Gobierno.
Pero el duque no poseía ningún retrato de su ilustre abuelo. Fue entonces que para salir del apuro encomendó a un pintor de la época que realizara un retrato de Colón tomando como modelo nada menos que a su ayuda de cámara para luego donarlo, pero con un simple detalle que el Colón del cuadro de marras aparece con un fino bigote y hasta ahora nadie ha podido asegurar que el Descubridor lo usara en alguna ocasión.
El controvertido cuadro fue escogido para el sello de un centavo de la emisión cubana conmemorativa del aniversario 450 del Descubrimiento de América puesta en circulación de 19 de mayo de 1944.

 

Vocabulario filatélico

CARTOFILIA: Es el coleccionismo de tarjetas postales enviadas o no por el correo.
CENSURADO: Sobre al que se le ha puesto una marca especial indicando que la carta ha sido leída por las autoridades civiles o miliares. Normalmente esto ocurre en tiempo de guerra.
CLÁSICO: Sello emitido con anterioridad al año 1900. Su coleccionismo se especializa en sellos de este período.
CLASIFICADOR: Libro o carpeta de hojas de cartulina con tiras transparentes donde se colocan y clasifican los sellos.
CLASICISTA: Es el coleccionista tradicional por países y emisiones.
COLOR: Cualidad cromática utilizada en la clasificación de los sellos. En los sellos clásicos el color fresco los revaloriza.

 

Buzón del filatelista

Víctor Gutiérrez Vázquez
Entrega General
Zona 19, Chepo,
Panamá.
Desea intercambio de material filatélico y correspondencia con amigos y amigas de diferentes partes del mundo.

 
Santiago Corragés López
Apartado Postal 5069
C.P. 10500, La Habana,
Cuba.
Colecciona sellos y sobres del primer día nuevos.

 
Alexis Izquierdo Rojas
Santovenia No. 119 entre
Patria y Lindero, Municipio Cerro,
La Habana, Cuba.
Desea intercambio de sellos de la temática Deportes de Invierno.

 
Ángel Marchena Pérez
Calle Dr. Marañón 2 Torres 3-6-A
10002, Cáceres,
España.

 
Emilio Mariño Alén
Osvaldo Sánchez No, 43 entre 38 y
Circunvalación, Reparto 26 de Julio
C.P. 80100, Holguín,
Cuba.
Intercambia sellos en general.

 
La próxima semana búsquenos en este mismo sitio. Gracias por su amable contacto.

Galería de Imágenes

Comentarios