Sinrazones en África
4 de abril de 2015
|Por muchas explicaciones que se traten de buscar, resulta imposible encontrar una sola razón que justifique los hechos sangrientos que estremecen a algunos países africanos en los últimos meses.
Cientos de muertos de manera casi salvaje en Nigeria donde, además, los terroristas secuestran jovencitas estudiantes y le obligan a prostituirse como esclavas del sexo.
Años atrás, la empobrecida Somalia sufrió y aun hoy sufre, los embates de fuerzas irracionales que han desestabilizado al país y ahora extienden sus tentáculos a Kenia.
¿Qué razón podría existir en un ser humano racional para emprenderla contra un campus universitario y asesinar a 147 jóvenes y herir a otras decenas, como acaba de ocurrir en Kenia?
Y, aunque el poder mediático insista en el apellido de islamista de estos grupos terroristas, para nada tiene que ver el Islán, como religión, en que haya hombres que actúen de esa forma.
Los autores de tan horrendo crimen forman parte del grupo radical islamista Al Shabab, originario de Somalia, considerada hoy como de las organizaciones más extremistas de la región.
Al Shabab siempre ha tenido como propósito controlar toda Somalia y ahora quiere extenderse a otros países cercanos, utilizando para ello el terrorismo.
Las autoridades de Nairobi, la capital de Kenia han informado que los atacantes a la universidad seleccionaron a los cristianos como sus víctimas.
De acuerdo con despachos de prensa de BBC Mundo, el nombre oficial del grupo es Karakat Shabaab al-Mujahidin pero se lo conoce fuera de Somalía como al Shabab, que significa “Juventud”.
No existe mucha información sobre sus orígenes, se identifica a Shabab como brazo armado del Consejo Islámico de Tribunales Somalíes que se apoderó de gran parte del sur de Somalía en la segunda mitad de 2006.
Ya en septiembre del 2013, milicianos de ese grupo terrorista habían atentado contra el centro comercial Westgate en Nairobi, donde luego de tres días de enfrentamientos con fuerzas locales de seguridad, se reportaron 61 civiles muertos y decenas de heridos.
En aquella oportunidad al Shabab circuló un mensaje donde decía que tal acción se realizó como venganza por el despliegue de las fuerzas kenianas en Somalia.
Sin embargo, parece haber coincidencia en que el grupo pretendía consolidar posiciones fuera de su territorio como parte de un nuevo plan regional.
Tal realidad se mostró cuando en junio del pasado año 2014, al Shabab declaró a todo el territorio keniano como zona de guerra.
Acorde con los tiempos modernos, este grupo terrorista, al igual que el llamado Estado Islámico, utiliza cotidianamente las facilidades de Internet y a través de Facebook y otras redes sociales, divulga sus acciones y contrata a terroristas para que se alisten en sus filas.
Estas sinrazones parecen imposibles de comprender en un África, donde aun predominan la pobreza y las enfermedades y donde el colonialismo primero y el neocolonialismo después, siguen mutilando el desarrollo y contribuyendo a la inestabilidad y la ingobernabilidad.
Comentarios
