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Pepe Sánchez. Entre boleros y guitarreos

4 de diciembre de 2019

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Apreciado como el creador del bolero cubano e impulsor del movimiento de troveros o cantadores santiagueros, José Viviano Sánchez, “Pepe Sánchez”, configura una de las figuras creadores del arte musical y guitarristicas de mayor destaque influyente de finales del siglo XIX cubano.
En consideración a estos y otros valores artísticos, Pepe Sánchez disfrutará por siempre la ecclesia visibilis más raigal de la cancionistica cubana de siempre; y también, a mi juicio, la verdadera y reservada ecclesia invisibilis en la congregación dispersa de creadores imperadísimos y que en realidad, no dejan espacio para fracciones de dudas ni equívocos.
Nacido entre guitarreos y cantares líricos de amor y fervor patrio, poco diré de la singular vida y obra de este gigante de la cancionistica cubana, y que para la descendencia del arte musical cubano, legó a la posteridad todo un mensaje de amor, intimidad y sobre todo, exaltación por los más altos valores patrios.
Pienso que por años este impacto la llevado a profundas reflexiones significativas e intentos por tratar de entender mucho de la singularidad de ese radiante encuentro crucial y definitorio entre cantantes y guitarras y que felizmente cristalizaron en el más puro arte trovadoresco.
Entre muchas explicaciones, el bolero en Pepe Sánchez, es el reflejo muy propio de hacer y sentir la música a lo cubano, y que sin deliberaciones, escapa del imaginario popular para adentrarse en los sensuales vericuetos del amor por la vida.
Al respecto, la memoria abunda en sorpresas como en las viejas fotografías atesoradas por años  y hasta en los más lujosos espejos, puesto que dar la razón a quien bien la merece es una prueba que algunos aún no acaban de aprender.
No sin cierto gustillo amargo, por ejemplo, en algunos círculos del mainstream musicológico de algunos países caribeños se maduran criterios adversos acerca de la creación del bolero de la autoría de Pepe Sánchez titulado Tristezas, como el primero en su especie, en la  creación musical cubana, cuestionándole propiedades irrefutables que originan enfermizas conjeturas, que alcanzan de manera irreverente la figura egregia de Pepe Sánchez. Incluso, se manejan hasta dañinos criterios velados por solapados acentos políticos. Entre algunos otros “juicios” se esgrimen: ¿fue realmente Pepe Sánchez el creador del bolero cubano? ¿Realmente fue Tristezas el primer bolero cubano en la historia? Pero hay más: ¿fue realmente Pepe Sánchez el máximo impulsor del movimiento trovero cubano en Santiago de Cuba? ¿El bolero cubano Tristezas modeló y dio forma definitiva al género que ya para algunos se escuchaba en la época? ¿Definió Tristezas el derrotero del bolero en la cancionistica cubana como identidad nacional?
Ante todo debe quedar claro que, el bolero tal hoy lo conocemos, nació en Santiago de Cuba, y las caracteristicas formales, armónicas y estilísticas del género, empleado por Pepe para su formulación en compás de 2/4  se deben a la creación de José Viviano Sánchez (Pepe) a partir de su bolero “Tristezas”(1883).

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