ribbon

Farmacoterapia del síndrome de Meniere

21 de junio de 2022

|

 

enfermedad-de-meniere-665x285

 

La enfermedad de ménière es un trastorno del oído interno que puede causar un mareo severo, un sonido en el oído llamado tinnitus, pérdida de la audición que aparece y desaparece y la sensación de presión o dolor en el oído. Aunque su causa no es aun del todo conocida, se cree que tiene que ver con los niveles o la mezcla de líquidos en los canales del oído interno.

Este síndrome fue descrito por primera vez por el médico francés Prosper Ménière en 1861. De acuerdo a cifras disponibles, afecta a cerca de 190 de cada 100 mil personas, siendo mayor su prevalencia en el sexo masculino y en la edad adulta.

Por tratarse de una enfermedad poco conocida, su diagnóstico exacto no resulta fácil y en muchos casos se realiza por exclusión de otras causas de vértigo. Si bien es una patología que no tiene cura de momento, existen diferentes elementos que se pueden conjugar para conseguir un tratamiento que reduzca al mínimo sus efectos.

Dentro de los distintos enfoques de tratamiento está también el farmacológico. Debido a que el síntoma más incapacitante de un ataque de la enfermedad de ménière es el mareo o vértigo. Ciertos medicamentos como meclizina, diazepam y lorazepam, pueden ayudar a aliviar los mareos y disminuir la duración del episodio.

Medicamentos como la betahistina o serc ayudan a muchos pacientes a aliviar los síntomas y en otros casos también son útiles antihistamínicos y diuréticos. No obstante, siempre ha de ser el médico quién decida qué fármaco tomar.

El antibiótico gentamicina inyectado en el oído medio ayuda a controlar el vértigo. Sin embargo, debido a que la gentamicina puede ocasionar daños en el oído interno y afectar la audición, con frecuencia se prefiere el empleo de corticoesteroides. La inyección de estos fármacos en el oído ayudan a reducir los mareos, sin que exista ningún riesgo de pérdida de audición.

Galería de Imágenes

Comentarios